Los docentes iniciaron una paralización el lunes 21 pasado, a raíz del sorpresivo regreso a Tegucigalpa del presidente constitucional, Manuel Zelaya, derrocado Brasil.
Zelaya hizo un llamado a un diálogo para encontrar una solución pacífica a la crisis, pero desde el amanecer del martes se mantiene sitiado en la sede diplomática por un fuerte contingente de militares y policías.
En un comunicado, la FOMH subraya que se mantiene firme en la lucha por la recuperación del orden constitucional y la restitución de Zelaya en su cargo.
Instruye también a los maestros y profesores a mantenerse atentos a los llamados de la FOMH y el Frente ante la grave crisis que atraviesa la nación.
Agradece al pueblo y gobierno de Brasil por la solidaridad brindada a Zelaya y a sus acompañantes, quienes -denuncia- son objeto de ataques, incluso con gases neurotóxicos.
El magisterio hondureño inició un paro el lunes 29 de junio en contra del golpe de estado y lo mantuvo casi un mes y luego decidió retornar a clases tres días de la semana y el resto acudir a las manifestaciones de la resistencia.
