Adalys Pilar Mireles - Prensa Latina.- El secretario general del Partido Comunista de Colombia, Jaime Caycedo, abogó hoy por el rápido restablecimiento de las conversaciones entre el gobierno y las FARC-EP, así como por un cese bilateral de las hostilidades.

Es necesario rodear al proceso pacificador de un clima de distensión y confianza mutua, urge además poner un freno a la victimización de la población civil, manifestó a Prensa Latina el dirigente político.

Esperamos que con las liberaciones de los retenidos puedan reanudarse con celeridad los diálogos entre las partes beligerantes, los que nunca debieron detenerse, añadió.

Caycedo cuestionó la decisión de cancelar el viaje de los negociadores gubernamentales a La Habana, adoptada por el presidente Juan Manuel Santos a raíz de la desaparición del general Rubén Darío Alzate.

Ambos equipos -insistió- deben seguir al pie de la letra lo que está consignado por los acuerdos preliminares, los cuales implican en esencia que nadie se levanta de la mesa de diálogos hasta lograr el objetivo de terminar el período bélico.

Para la abogada Piedad Córdoba, defensora de los derechos humanos, resulta igualmente impostergable una tregua.

No podemos seguir hablando de paz mientras hacemos la guerra, opinó la exsenadora para quien el proceso negociador es irreversible.

Ninguna fuerza por maléfica que sea podrá arrebatarnos la posibilidad de finalizar la confrontación, se trata de un sueño, de una aspiración que constituye patrimonio de todos los colombianos, enfatizó la líder del movimiento popular Marcha Patriótica, una plataforma donde convergen numerosas organizaciones sociales radicadas en distintas zonas del país.

Por su parte el senador Iván Cepeda aseguró que la reciente decisión de liberar en el menor tiempo posible al general Alzate y a otros cuatro retenidos, en poder de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo (FARC-EP), demuestra la responsabilidad y compromiso de esa agrupación insurgente con las conversaciones, para dejar atrás más de medio siglo de enfrentamientos.

Se trata de un proceso el cual transcurre paradójicamente en medio de combates, considero que trataron de convertir un episodio en una crisis, subrayó en diálogo con Prensa Latina.

Estudiantes, campesinos, maestros, religiosos caminaron la víspera por una céntrica avenida bogotana hasta el parque San Martín para decir: No a la guerra, que sigan los diálogos.

Fuimos muchos los que votamos en las pasadas elecciones presidenciales por el fin del conflicto, por el proyecto de la paz, así que exigimos descartar cualquier pretexto que frustre esos deseos, dijo Fani Cordoa, religiosa franciscana de la Sagrada Familia.

Santos aseguró la víspera que una vez en libertad Alzate y las otras cuatro personas, regresarían a Cuba sus voceros para proseguir los ciclos de encuentro.

Los países garantes de las conversaciones (Cuba y Noruega) anunciaron la pronta liberación del general, del cabo Jorge Rodríguez, la abogada Gloria Urrego y dos soldados.

Un grupo gubernamental y representantes de las FARC-EP platican en La Habana desde 2012 con el propósito de terminar más de medio siglo de enfrentamientos, los cuales dejaron alrededor de seis millones de víctimas, entre ellas 230 mil muertos, torturados, desplazados, secuestrados y desaparecidos.

El general fue capturado al transitar por una zona de operaciones de guerra, vestido de civil y sin escolta.