Alberto Mas, corresponsal de Cubainformación en Buenos Aires.- Pasaron 43 años de aquel nefasto 24 de marzo de 1976 para la Argentina. Memoria, verdad y justicia sigue siendo el reclamo actual, el mismo año que las mafias de Miami conforman la Coordinación de Organizaciones Revolucionarias Unidas (CORU) para operar directamente en las acciones contra Cuba en el continente (Operativo Gilette), aliadas a las dictaduras militares de la región y al servicio de la CIA y el Departamento de Estado norteamericano se convierten en uno de los pilares de la Operación Cóndor.

Entre 1976 y 1978 se llevaron a cabo en Argentina operativos contra la Embajada de Cuba que involucraron a 22 personas, 5 cubanos y 17 argentinos y argentinas que fueron secuestrados, torturados y desparecidos mayoritariamente, siendo el centro clandestino de detención y tortura conocido como Automotores Orletti donde se coordinaron las acciones y entre los torturadores del lugar se confirmó la presencia de Michel Townley y los hermanos Sempol de la CORU.

Las acciones estuvieron direccionadas contra personal argentino contratado por la Embajada de Cuba para trabajar en el área Comercial, servicios y la escuela anexa para hijos de funcionarios cubanos, 11 desaparecidas y desaparecidos, 6 sobrevivientes fue el saldo, mientras que contra personal cubano desarrollan dos operativos, 3 los cubanos detenidos un par de días y sobrevivientes mientras que un grupo de tareas el 9 de agosto de 1976 secuestra a Crescencio Galañena Hernandez y Jesús Cejas Arias, custodios de la Embajada de 27 y 22 años respectivamente, desaparecidos cuyos restos fueron hallados dentro de tambores de chapa rellenados de cemento, identificados y repatriados en los años 2012 y 2013 a Cuba. En las mismas condiciones se encontró el cuerpo de la empleada de la Escuela San Martín anexa a la Embajada, María Rosa Clementi de Cancere, el resto de los desaparecidos, nunca aparecieron.

En éste contexto, el Movimiento Argentino de Solidaridad con Cuba, participó en la marcha del 24 de marzo a la Plaza de Mayo llevando las pancartas de Jesús y Crescencio, junto a cientos de miles bajo la consigna del Nunca Más.

El viernes pasado, en la Casa de la Amistad Argentina Cuba de Buenos Aires, un sentido homenaje del MAS Cuba, el Espacio de la Memoria “Virrey Cevallos” y la Embajada se llevó a cabo por los compañeros cubanos y argentinos/as detenidos desaparecidos, luego de la proyección de un video sobre Galañena y Arias, hicieron uso de la palabra la ex embajadora argentina en Cuba, Juliana Marino, que participara en los actos de restitución de los restos de ambos jóvenes en Artemisa y en Pinar del Rio, la emoción embargó a los asistentes, también Alba Pereyra de Lanzilotto, relató sobre su encuentro con los familiares y el Embajador Orestes Pérez Pérez cerrando la lista de oradores recordando aquellos aciagos años.