Alberto Mas, corresponsal de Cubainformación en Buenos Aires - fotos Laura Mor.- En Argentina se han levantado voces de organizaciones médicas contra las misiones médicas cubanas, cuestionando, al menos por desinformación propia, la formación profesional de la Brigada Henry Reeve, como se conoce popularmente al Contingente Internacional de Médicos Especializados en Situaciones de Desastres y Graves Epidemias que ha formado Cuba para atender situaciones como la que se nos presenta hoy con el COVID-19.
Fue esta misión cubana la que frenó la epidemia del Ebola en África, cuando nadie se animaba a enviar médicos para combatirla, pero debemos recordar que EE.UU en su momento le bloqueó fondos que se transferían para abastecer de insumos a dichos médicos, como hoy desfinancia a la OMS, Organización Mundial de la Salud, en medio de la pandemia mundial.
Es la brigada Henry Reeve la que está trabajando solidariamente en 60 países, 40 de los cuales sufren los embates del coronavirus y acaba de enviar 21 misiones a 20 países para combatir al Covid-19. (Italia ya recibió 2 grupos de médicos cubanos). Aclarándole a algunos profesionales desinformados que éstos equipos de trabajo cumplen en Cuba la cuarentena preventiva y se les realiza los estudios correspondientes antes de iniciar la misión.
Son ya 45 los países que han solicitado a Cuba de que los provea del Interferón Alfa B2 Recombinante, el medicamento antiviral que fue uno de los que curó a los enfermos del brote en China, diseñado y fabricado por Cuba.
Debe molestar también a las corporaciones el sistema de salud cubano, que cuenta con un médico cada 113 habitantes y es totalmente gratuito, mientras que en Argentina solo hay un médico cada 253 personas y en Estados Unidos 1 médico cada 386 ciudadanos.
El sistema médico cubano está escalonado y se inicia con el médico de familia, cada barrio, cada habitante tiene un médico asignado que controla su salud permanentemente, que lo conoce y tiene una relación personal con él. Luego vienen los hospitales con distintas complejidades, regionales, nacionales, etc.
Las organizaciones profesionales que son utilizadas para intentar desacreditar a los médicos y la medicina cubana seguro que tampoco consideran como está abordando Cuba esta pandemia, Cuba tiene hoy 81 casos de afectados por millón y una tasa de mortalidad del 3.36, mientras que Estados Unidos tiene 2.151 enfermos declarados por millón de habitantes, con una tasa de mortalidad del 4.61(datos al 17/04/20 – 14 horas), reconociendo que son muchos los casos que no se denuncian por el alto costo de la medicina norteamericana y pasan por muertes provocadas por otra sintomatología.
En Cuba, a las medidas de aislamiento, uso de barbijos, masivos test, desinfección de calles y lugares públicos y otras medidas típicas, se le agrega la eficiencia del sistema de salud y el control de los grupos de riesgo, los médicos de familia han recorrido todas las familias entregando el PrevengHo Vir, medicamento homeopático que se utiliza para reforzar los sistemas inmunológicos ante la pandemia y un seguimiento permanente, persona por persona, de aquellos que por edad o enfermedades previas así lo requieren.
Todo esto con un genocida bloqueo que le aplica Estados Unidos desde hace 61 años.
Otros que están muy preocupados por la existencia de las brigadas médicas cubabas, como los medios hegemónicos de comunicación, lo hacen con un nivel de inmoralidad que desespera, no les importa cuántos muertos se lleve la pandemia si eso les hace ganar más dinero a los grupos económicos que los controlan.
Nadie de los que atacan las misiones médicas cubanas han levantado la voz cuando en los últimos cuatro años las políticas neoliberales del gobierno de Mauricio Macri desfinanciaron el sistema de salud y hasta rebajo el Ministerio a Secretaría, no cuestionaron los despidos para achicar presupuestos en los hospitales, ni cuando las vacunas se descontinuaban, o como cuando la ex gobernadora de la provincia de Buenos Aires, María Eugenia Vidal, expresó que no iba a inaugurar más hospitales ni completo los que se estaban instalando cuando asumió, dejando en la ruina también 24 ambulancias sin estrenar en el año 2017, recién descubiertas por las nuevas autoridades provinciales, ni que el jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta propuso unir cinco hospitales en solo uno, por un negocio inmobiliario en ciernes.
¿Qué es lo que molesta con los médicos cubanos y la medicina de la Isla?, es la pregunta que cualquiera se hace, ¿será que no pueden hacer negocios con la pandemia?, será que esas organizaciones profesionales son controladas en realidad por las grandes corporaciones de la salud?, ¿será que adoran tanto a los Estados Unidos de Norteamérica que quieren emular la cantidad de afectados y muertos por el Covid-19?, porque no tiene sentido atacar la posible colaboración de Cuba con la Argentina, salvo que hallan conversaciones entre ambos estados y se intente que no lleguen a buen término generando un espíritu anti-cubano en la población, algo que seguro no conseguirán.