Alberto Más, corresponsal de Cubainformación en Buenos Aires.- Un saludo fraternal a todas y todos los periodistas y comunicadores, militantes de una comunicación objetiva y no neutral, como decía Ricardo Masetti, no se puede ser neutral entre el bien y el mal, en éste Día del Periodista que celebramos hoy

Haciendo un poco de historia el Día del Periodista nace el 25 de mayo de 1938, como un acto de los trabajadores de prensa organizados, en el Primer Congreso Nacional de Periodistas que se hizo en la ciudad de Córdoba.

Allí se definió el 7 de junio como el Día del Periodista en conmemoración del día en que apareció por primera vez un medio de prensa, un periódico, con ideas patrióticas en las nacientes Provincias Unidas del Rio de la Plata, un 7 de junio de 1810, la GAZETA DE BUENOS AYRES” que fue fundada por Mariano Moreno a instancias de la Primera Junta del gobierno patrio instalado el 25 de mayo de 1810 y que contó con redactores como Manuel Belgrano, Juan José Castelli, Bernardo Monteagudo, Manuel Alberti, el sector, podemos decir, más ligado e impulsor de una política de total descolonización e independencia de las América.

Volviendo al Congreso de trabajadores de Prensa de 1938, se afirmó que «La Gazeta de Buenos Ayres, no solo fue el primer diario argentino sino que también inauguró la libertad de prensa en la América meridional», también en éste congreso se elaboraron las bases del “Estatuto del Periodista Profesional” que hoy nos rige y que se estableciera por decreto en 1944 y que fuera ratificado por el Congreso Nacional en 1946.

Y aquí, desde su nacimiento la comunicación nace como un hecho político, “para dar a conocer a las provincias el nuevo sistema naciente, para difundir las noticias prósperas o adversas sobre el sucesivo estado de la Península, el pueblo tiene derecho a saber la conducta de sus representantes”. Así lo marcaba el decreto de su creación y que reflejaban sus ediciones.

Y llegamos al día de hoy, donde la discusión corre por caminos paralelos, el sindical, que se ocupa de la manera y condiciones en que los trabajadores de prensa desarrollan su actividad en las empresas, y por otro lado la comunicación y su rol en la batalla de ideas, donde el enemigo tiene no solo el capital para desarrollarla, sino también las ideas y objetivos muy claros.

Allen Dulles, director de la CIA decía en 1947: “El Objetivo a escala planetaria es derrotar en el terreno de las ideas las alternativas a nuestro dominio” y lo completaba en 1977 Zbignew Brzezinky, que fue consejero de Seguridad del presidente norteamericano Carter afirmando “El poder global debe desempeñarse en la dominación cultural, y ejercerse mediante la hegemonía sobre las comunicaciones globales, las diversiones populares y la cultura de masas”

El sueño de la LIBERTAD DE PRENSA se ha convertido en la realidad de la LIBERTAD DE EMPRESA, libertad que impone el imperio para controlar y dominar el continente, un continente donde 6 grupos empresarios conducidos por la CNN y cuatro agencias noticiosas controlan el flujo del 99% de las noticias.

Por eso en este DIA DEL PERIODISTA deberíamos tratar, al menos, de poner algunos conceptos para el debate:

Si la COMUNICACIÓN ES UN BIEN SOCIAL, no puede estar en manos privadas, no deberían existir EMPRESAS dueñas de MEDIOS DE COMUNICACIÓN, donde la mercancia "información-comunicación" se venda al mejor postor, los medios deben estar en manos del Estado, de los movimientos sociales, culturales, políticos, universidades, sindicatos, cooperativas, organizaciones, pueblos originarios, es decir, cumpliendo un rol social, dándole nuevas formas y modelos comunicacionales a ésta etapa que atravesamos, construyendo medios de comunicación propios, redes propias de difusión locales y territoriales, debemos construir nuevas formas para comunicar desde el campo popular.

Hoy la comunicación es un arma de esta guerra cultural que nos imponen, por eso, en este día, un abrazo fraterno a todas y todos los que hacen de la comunicación un campo de resistencia, una trinchera de lucha contra el avance imperial para construir un país justo, libre y soberano, en una Patria Grande, Latinoamericana y Caribeña, unida e independiente.

Como decía Ricardo Masetti al fundar la Agencia Prensa Latina, por una comunicación objetiva, pero no neutral, porque no se puede ser neutral entre el bien y el mal.