Cubadebate.- El atentado con explosivos perpetrado el domingo en una populosa barriada de Guayaquil, que dejó cinco muertos y casi una veintena de heridos, hizo que el Gobierno ecuatoriano ampliara la vigencia del estado de excepción. Las autoridades, que atribuyeron la acción al crimen organizado, informaron que hay varios detenidos.

De acuerdo con la investigación, dos personas a bordo de una moto llegaron a media madrugada al barrio Cristo del Consuelo y cerca de un restaurante colocaron un saco en cuyo interior se presume que había un explosivo de alto poder, fabricado artesanalmente.

Además de muertos y heridos, la explosión causó afectaciones en ocho viviendas que perdieron paredes, cuatro vehículos y una motocicleta.

En abril, el presidente Guillermo Lasso declaró por 60 días un estado de excepción en las provincias de Esmeraldas, Manabí y Guayas, cuya capital es Guayaquil, a causa de la violencia ligada al tráfico de drogas. Con la ampliación a raíz del ataque, esa medida se extenderá por 30 días en esa ciudad puerto de 2.8 millones de habitantes, en el suroeste del país.

El estado de excepción implica la conformación de una fuerza especial integrada por policías y militares, además de la movilización de recursos materiales.

En un tuit poco después de la explosión, el ministro del Interior, Patricio Carrillo, la calificó de “declaración de guerra al Estado” y la atribuyó a “mercenarios” del crimen organizado.

Posteriormente, precisó que hay varias líneas de investigación. Una de las hipótesis es que el ataque estaba dirigido contra alias Cucaracha y Junior, quienes aparentemente tienen alguna relación con la banda denominada Los Tiguerones, vinculada con el tráfico de drogas y una de las que se disputan el control en las cárceles del país.

“Alias Cucaracha aparentemente tenía en zozobra el lugar”, dijo Carrillo.

Otra línea de investigación, según el funcionario, está relacionada con el decomiso de cerca de 250 kilos de droga el pasado 12 de agosto en Chongón, Guayaquil. De acuerdo con Carrillo, esas acciones de las autoridades suelen producir actos en “represalia”, como el de este domingo.

Agregó que el decomiso fue un golpe en la economía de las organizaciones criminales. “Aquí lo que está en juego es una motivación netamente económica, ilegal, subterránea, que puede llevar a estos actos de enorme irracionalidad”, comentó.

El ministro del Interior informó que ya fueron detenidas cinco personas en Guayaquil por su presunta participación en el ataque, durante 11 allanamientos realizados en la urbe. Además, el Gobierno ofreció 10 000 dólares por información que ayude a capturar a los responsables del hecho.

También dijo que entre los heridos hay algunos con antecedentes. “Muchos de ellos, por no decir la mayoría, han invocado su derecho a guardar silencio y no quieren cooperar con la investigación”, indicó.

Colombia y Perú, vecinos de Ecuador, son grandes productores de cocaína. Según las autoridades, grupos criminales usan el territorio ecuatoriano como zona de almacenamiento y exportación de la droga hacia América del Norte, Europa y otros mercados.

Guayaquil, 270 kilómetros al suroeste de Quito, ha sido escenario de balaceras y asesinatos que las autoridades atribuyen a enfrentamientos entre bandas rivales del narcotráfico. Además, es sede de la mayor cárcel estatal, donde se han registrado peleas y matanzas entre grupos criminales.

En los últimos años, las cárceles ecuatorianas se han convertido en escenario de violentos ataques entre reclusos, principalmente debido a disputas entre bandas del narcotráfico y rutas de exportación de drogas presuntamente vinculadas con cárteles mexicanos.

En el decreto para ampliar el estado de excepción se señala que Guayaquil es “la zona de mayor cometimiento de homicidios intencionales” en el país, con un 32.5% de los casos. En lo que va del año, 861 personas han sido asesinadas en esa ciudad, eje económico de la nación.

El de este domingo no es el primer ataque con explosivos en el país. Entre enero y agosto, la policía ha reportado 145, de los cuales 72 ocurrieron en el distrito de Guayaquil.

(Con información de La Jornada, AFP y RT en Español)