teleSURtv_Oficial.- La composición de los futuros diputados comprende a 94 jóvenes y Denis Suarez Valera es uno de ellos. Nuestra corresponsal, Fabiola López, nos muestra la tercera entrega de un seriado sobre las elecciones generales donde podemos conocer quienes serán los diputados que integrarán la Asamblea Nacional del Poder Popular.
26 razones jóvenes para votar este domingo
Se trata de un acto cívico que debemos asumir con responsabilidad, toda vez que la cruz en la boleta por uno, por varios, o por todos, entraña un voto de confianza y de respaldo a los candidatos y a la Patria.
Juventud Rebelde - Foto: Roberto Suárez.- Cuba vuelve a las urnas este domingo 26 de marzo. Lo hace ahora para elegir a los diputados a la Asamblea Nacional del Poder Popular. Otra vez, cada ciudadano tiene el derecho de votar, de manera libre, directa y secreta, por sus candidatos, en un ejercicio soberano en el que convergen nuestros derechos y deberes.
Se trata de un acto cívico que debemos asumir con responsabilidad, toda vez que la cruz en la boleta por uno, por varios, o por todos, entraña un voto de confianza y de respaldo a hombres, mujeres y jóvenes nominados por sus méritos y por su capacidad para representarnos en el órgano supremo del poder del Estado y, desde allí, como expresó el Maestro, cumplir su mandato de «hombre encargado por el pueblo para que estudie su situación, para que examine sus males, para que los remedie en cuanto pueda, para que esté siempre imaginando la manera de remediarlos…».
Estas son mis 26 razones para acudir este domingo a las urnas y hacerlo temprano, pero también para respaldar por siempre nuestro proyecto de justicia social, que enfrenta no pocos desafíos, pero no cejará en su empeño de prosperidad y bienestar para su pueblo. ¿Tú ya tienes las tuyas? Te invito a que las dejes al final de este artículo o las envíes a nuestro correo.
- Porque es mi derecho como joven al cumplir los 16 años y no sucede así en muchos países. Esta es una gran oportunidad para asumir una responsabilidad política, participar de la vida ciudadana y ser parte de las decisiones y el rumbo de la Cuba que queremos construir colectiva y cotidianamente en distintas esferas de la vida social.
- Porque la capacidad que tenemos de nominar y ser nominados, de elegir y ser elegidos como representantes del pueblo es una conquista social que merece ser aprovechada y demuestra que la vida en democracia es el gobierno de todos y para todos.
- Porque es evidencia de que los jóvenes participamos, nos interesa lo que está sucediendo y buscamos —y necesitamos— representantes que trabajen por los intereses comunes y no de unos cuantos, y no somos ese grupo social desinteresado por los acontecimientos sociales de nuestra Patria, como nos catalogan algunos.
- Porque no quiero que nuestros niños, adolescentes y jóvenes carezcan de escuelas, maestros, vacunas, hospitales… como lo vivieron y sufrieron muchos en la Cuba de antes de 1959, etapa en la cual, por ejemplo, la mortalidad infantil superaba los 60 fallecidos por cada mil nacidos vivos.
- Porque la Educación en nuestro país llega hasta los lugares más lejanos de la geografía nacional y hoy el Estado destina el 23 por ciento de su presupuesto a este sector para ofrecer una educación inclusiva, gratuita y de calidad desde la primera infancia hasta la enseñanza universitaria de posgrado.
- Porque nuestras universidades siguen pintadas de negro, de blanco y de mulato como las convocara el Che, y en ellas la superación profesional está al alcance de todos aquellos interesados en cursar programas de maestría, posgrados y doctorados.
- Porque la Constitución de la República prohíbe el trabajo de los niños y adolescentes, exige protegerlos de todos los tipos de violencia, asegura que los hijos tienen iguales derechos, y que el Estado, la sociedad y las familias reconocen a las personas jóvenes como activos participantes en la sociedad.
- Porque el nuevo Código de las Familias fue pensado para las nuevas generaciones y al situar el amor, el afecto, la
solidaridad y la responsabilidad en lo más alto de los valores familiares, reconoce a los niños y adolescentes como sujetos de derecho y no objetos de protección, a la vez que siembra las bases para una juventud más plena y responsable. - Porque los jóvenes desvinculados del estudio y del trabajo pueden sumarse a programas educativos o proyectos de desarrollo local que contribuyen a su formación y superación, con énfasis en las comunidades y las familias en situación de vulnerabilidad social.
- Porque más del 80 por ciento de los cubanos hemos nacido bajo el injusto bloqueo norteamericano que nos limita, por ejemplo, acceder a tecnología de punta, bases de datos e investigaciones, pero no ha impedido nuestras ganas de hacer, innovar, aportar, generar nuevos conocimientos…
- Porque tenemos a punto una Política integral para la niñez y las juventudes cubanas y un plan de acción para implementarla que busca el desarrollo integral de las nuevas generaciones, así como el respeto pleno a sus derechos, su protección e inclusión social.
- Porque en los tiempos difíciles de la COVID-19 fuimos nosotros, los jóvenes, lo que ocupamos los más disímiles roles en el quehacer científico, en hospitales, centros de aislamiento, en la ayuda a los vulnerables o más desprotegidos, y también ofrecimos nuestra mano solidaria a otras naciones.
- Porque eran jóvenes varios de los que murieron, lamentablemente, enfrentando el fuego en el accidente en la base de supertanqueros de Matanzas, y
también quienes auxiliaron en los primeros momentos a las víctimas de la explosión en el hotel Saratoga, y los que después permanecieron horas y días sin descansar tratando de rescatar personas con vida. - Porque son mayoría los muchachos que hemos visto batirse en busca de la transformación social de nuestras comunidades, o laboran turnos muy duros para cumplir con producciones vitales para el país, como si vivieran una epopeya o una aventura.
- Porque el Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, ha dicho y ha demostrado que «es preciso hablar y compartir realizaciones con nuestros jóvenes como las más importantes personas que son; distinguirlos como gestores de las transformaciones en marcha».
- Porque en las nuevas generaciones Fidel depositó siempre una especial confianza, aseguró que «en ellas están puestas las esperanzas de la Revolución» y apostó porque aprendieran por sí misma a ser revolucionarias, a que se convencieran a sí misma y desarrollaran plenamente su pensamiento.
- Porque tendremos una Asamblea Nacional del Poder Popular con más jóvenes, mujeres, negros y mulatos…, con un nivel de instrucción superaltísimo. Sus decisiones y los temas que analiza, como hemos visto en estos años, influyen directamente en la vida cotidiana de los cubanos.
- Porque nos gusta ser desenfadados, rebeldes, críticos, irreverentes, pero no somos irresponsables. Nos gusta divertirnos de muy diversas maneras, como lo hicieron otros en su tiempo, pero estamos conscientes de que el cambio, el progreso, un mayor acceso a las nuevas tecnologías también necesita de la juventud.
- Porque sabemos que la Revolución llegó intacta hasta aquí por la obra y la entrega de muchos, y en esa fuerza colosal los jóvenes tuvieron un rol primordial. Así, hemos aprendidos que convertir problemas en oportunidades, en soluciones, fue y es motor impulsor en la casa, en el barrio, en la escuela o el centro de trabajo, en toda la sociedad.
- Porque nadie tiene el derecho de decidir nuestro destino ni darnos recetas de democracia, desde el odio y el hostigamiento hegemónico.
- Porque los hombres y mujeres de bien, dondequiera que estén, saben que esta Isla pequeña geográficamente, pero inmensa en voluntad y arrojo, vive orgullosa de la hazaña de sus hijos, como lo acaban de hacer los muchachos del Team Asere.
- Porque hemos aprendido a descubrir el discurso manipulador de quienes pretenden que no participemos en estas elecciones para descalificar el sistema político y la democracia socialista.
- Porque, aunque sabemos que la Revolución socialista tiene que superar errores, burocracias e insensibilidades y ensanchar la democracia, conocemos muy bien que el causante principal de la grave situación actual del país es el recrudecido bloqueo norteamericano.
- Porque somos herederos del civismo, el compromiso político y la lucha por la justicia y la dignidad de generaciones de patriotas cubanos.
- Porque confiamos en que la reconfiguración ofrecida por la nueva Constitución a nuestro Estado y las nuevas competencias y atribuciones de sus estructuras, incluyendo la Asamblea Nacional del Poder Popular, contribuirá a fortalecer la eficacia de nuestro sistema político, ampliar su carácter deliberativo y acentuar los contrapesos por el bien de la prosperidad de nuestro pueblo.
- Y porque soy cubano y mi tiempo de contribuir a un mejor porvenir para mi familia, mis vecinos, mis compañeros, mi país, es ahora.