Alberto Mas, corresponsal de Cubainformación en Buenos Aires, con fotos de Elias Enrique, Jorge Gessaga, Alejandro Avots y Marita Costa.- A dos años del intento de la CIA y los aparatos comunicacionales del Departamento de Estado de desestabilizar la Revolución en Cuba, la solidaridad entre los pueblos muestra en forma contundente que Cuba no está sola.
Un 11 de julio de 2021, Estados Unidos lanza una operación de pinzas contra Cuba, mercenarios internos aprovechando la difícil situación económica producida por el bloqueo, pero recrudecida por la pandemia, salen a la calle, logrando movilizar el descontento de algunos pocos y en el exterior genera una tremenda operación mediática, típica de los golpes blandos.
La unidad de la mayoría del pueblo con la Revolución desbarató esta opereta, pero eso no quiere decir que Washington abandonara los intentos de subvertir el orden en la Isla.
A dos años de ese hecho, utilizan las redes sociales y algunos ínfimos grupúsculos en el exterior para querer mostrar en sus campañas la falsa idea de que existe una oposición organizada al gobierno y al socialismo en Cuba.
Con ese objetivo pretendían hacer un acto frente a la Embajada de Cuba en Buenos Aires, cuando el Movimiento Argentino de Solidaridad con Cuba había convocado a las organizaciones políticas, sindicatos, movimientos sociales y casas de amistad con la Isla, a una actividad en celebración del 70 aniversario del asalto al Cuartel Moncada por parte de Fidel Castro y la generación del centenario, dando origen a la última etapa del proceso de liberación iniciado por José Martí, que finaliza con el triunfo de la Revolución el 1 de enero de 1959.
Cientos de militantes se hicieron presentes en el barrio de Belgrano, a pesar de la lluvia y el frio para rendir homenaje a la Revolución Cubana, a Fidel, a Raúl, al Che y a todo el Pueblo de Cuba que resiste los embates del imperio norteamericano, pero que al mismo tiempo trabaja para un mundo mejor, desarrolla vacunas contra el covid, envía médicos a colaborar con los más necesitados de este mundo, y se convierte en la primer trinchera del continente para frenar en lo político el proceso de recolonización de lo que EE.UU considera su patio trasero.
Se instaló una radio abierta donde reiteradamente se expresó la exigencia de que EE.UU., se haga eco del clamor mundial, incluso votado en las Naciones Unidas en treinta oportunidades, de levantar el genocida bloqueo a Cuba, quitarla de la espuria lista de Estados patrocinadores del terrorismo y que cierren la cárcel y devuelvan el territorio ilegalmente usurpado de Guantánamo.
Sobre el final de la actividad el embajador de Cuba Pedro Pablo Prada agradeció a los participantes en el acto su permanente solidaridad con la isla, que enfrenta un bloqueo recrudecido. Dijo que ese espíritu que irradió la gesta del Moncada hace 70 años, es el mismo que mantiene hoy el pueblo cubano, que está en pie de lucha en defensa de la Revolución
Aseguró que, sin la especial solidaridad de los pueblos del mundo, entre ellos el argentino, no hubiera sido posible la obra gigantesca de la Revolución.
Agregó finalmente que Cuba no defraudará a los amigos solidarios argentinos, y ante las agresiones de EEUU, avanzará en la construcción de una sociedad más justa y humana para todos.
Mientras la militancia colmaba la calle apoyando la Revolución Cubana, un pequeño grupo de serviles obsecuentes vendepatrias que gozan de las mieles de la NED, la USAID y CADAL (agencias y ong apéndices de la CIA), miraban absortos el acto.
Cuba no está sola, los pueblos del mundo la acompañan.