• Para salvar a Bush y a Posada, un show interminable, cuyos principales protagonistas ya están muertos y enterrados

JEAN-GUY ALLARD - Granma Internacional.- SEMANAS después que el Miami Herald haya asegurado que un Gran Jurado de Newark ya había terminado su investigación sobre patrocinadores de Luis Posada Carriles y que la Fiscalía ya manejaba el caso a favor del terrorista, el Star-Ledger, el diario más grande de Nueva Jersey, revela que el tribunal de instrucción sigue investigando a "comerciantes del exilio cubano". Mientras el terrorista se encuentra libre en Miami, mafiando con su red de asesinos, el aparato judicial de Bush continúa en su estrategia de ganar tiempo a favor del viejo agente CIA.

Tanto es así que los dos principales protagonistas de lo que fue la operación de financiamiento de Posada en múltiples acciones terroristas realizadas a partir de El Salvador, los negociantes Abel Hernández, residente de Cliffside Park y propietario del supermercado "Mi Bandera" de Union City, y Arnaldo Monzón Plasencia dueño de las tiendas "Arnold Stores", en esta misma localidad, ya descansan en paz.


Según el Star-Ledger, el Gran Jurado acaba de citar a Lourdes López, la ayudante de Hernández, y a Albín Martínez, el ex dueño de una agencia Western Union local.

Martínez reveló que los dos difuntos y sus cómplices han enviado más de $30 mil dólares a Posada para financiar sus actividades de terrorismo contra Cuba en el curso de 1997.

El Gran Jurado también ha analizado la participación de Oscar Rojas, quien fue contador durante 20 años de Monzón Plasencia. Sin embargo, el individuo fue excusado de rendir testimonio cuando compareció ante el tribunal el 15 de febrero 2006, afirma su representante legal Gilberto García.

Aparte de Hernández y Monzón, las dos principales figuras del complot objeto de la investigación, aparece el nombre de un ayudante del congresista Albio Sires, el terrorista Ángel Alfonso Alemán, también implicado en el caso de La Esperanza, este yate interceptado accidentalmente por la guardia costera en Puerto Rico mientras se dirigía a la isla venezolana de Margarita en un intento de asesinato del Presidente Fidel Castro.

Ninguna referencia al actual papel político de Alemán y a su implicación en esa acción terrorista ha sido publicada hasta ahora en la prensa de New Jersey y de Miami.

El hijo de Alemán, José, también es objeto de sospechas en el caso.

Según el diario de New Jersey, el FBI ha prohibido expresamente a los testigos contactar de ninguna forma a los medios de comunicación. Una precaución aparentemente inútil.

LA MAFIA MIAMENSE, FUERA DE ALCANCE

Llama la atención que durante el período donde Posada desarrollaba su campaña de terror contra objetivos turísticos de La Habana, provocando la muerte de Fabio Di Celmo, ningún representante del aparato judicial norteamericano molestó, aunque fuera un solo minuto, a los dos negociantes y a sus socios miamenses de la Fundación Nacional Cubano Americana. Aunque la CIA y el FBI no podían entonces ignorar aquella conspiración.

Está ampliamente demostrada la complicidad, en este complot terrorista manejado por Posada, de los miembros del Grupo Paramilitar de la FNCA, en Miami, cuyo apoyo fue decisivo en la ejecución de sus acciones. Ninguno de sus miembros ha sido objeto de una investigación a pesar de las numerosas evidencias.

Otra manifestación de mala fe del aparato de justicia bushista: el propio Posada nunca ha sido interrogado sobre el tema cuando se encuentra en este momento en territorio norteamericano, a disposición de los tribunales.

La investigación del Gran Jurado empezó en agosto del 2006, a raíz del "descubrimiento" de la existencia de un fax enviado por Posada Carriles desde El Salvador, en el que mencionaba a la Western Union de New Jersey, para liquidar la cuenta de un hotel.

En 1997, el ingeniero guatemalteco Antonio Jorge Alvarez (Tony), quien manejaba las actividades de la firma WRB Enterprises en Guatemala, se enteró de que Posada preparaba un atentado contra el Presidente cubano para la Cumbre Iberoamericana que iba a tener lugar en isla Margarita, Venezuela. Posada también preparaba la campaña de bombas contra hoteles de la Isla.

El Gran Jurado de Newark no ha juzgado conveniente hasta ahora entrevistar a Álvarez, quien reside en Greenville, Carolina del Sur.

Hace ya meses, la periodista norteamericana Ann Louise Bardach reveló en The Washington Post cómo el expediente de Posada, guardado en las salas de pruebas del FBI de Miami, fue desaparecido años atrás por el agente especial Ed Pesquera, hijo del ex Jefe de esta sección regional de la policía federal, Héctor Pesquera.

La reportera reclamó explícitamente en aquel momento una investigación sobre el tema. Su solicitud fue ignorada.

Nunca, desde su arresto, la administración norteamericana tuvo el menor deseo de declarar terrorista a Luis Posada Carriles, un agente de la CIA que los Bush y los cabecillas de la mafia cubanoamericana consideran su héroe de la guerra sucia  contra Cuba. Al contrario, ha desarrollado una compleja estrategia jurídica, típica de su sistema de justicia, con el fin de hundir para siempre el caso del delincuente internacional reclamado por Venezuela.

Paradójicamente, el caso Posada sigue manejado directamente desde Washington por los fiscales de la Sección Antiterrorista del Departamento de Justicia encargados por el ex Procurador General Alberto Gonzales de desaparecer el dossier en un mar de procedimientos inútiles. Gonzales que también manejó a su manera el secuestro de los Cinco, acaba de renunciar por haber manipulado las decisiones de sus fiscales por fines políticos.

Ultimo capítulo de esta comedia bufa, el presidente de El Salvador, Antonio "Tony" Saca, de visita en Miami, acaba de declarar al Miami Herald que Luis Posada Carriles "no es bienvenido en El Salvador".

El mandatario omitió, sin embargo, mencionar que sigue dando cobertura a Francisco Antonio "El Panzón" Chávez Abarca, el principal cómplice de Posada en su país, responsable de numerosas acciones contra Cuba, hoy detenido por ser jefe de una red de "robacarros".

Chávez Abarca, organizador de la serie de atentados que le costó la vida al joven turista italiano Fabio Di Celmo, está encarcelado desde meses en  el Centro Penitenciario La Esperanza de San Salvador, cárcel principal de la nación centroamericana.

Contra Cuba
Canal Caribe.- "Hacemos Cuba: ¿Cómo actúan las autoridades ante la desobediencia, el desacato y agresiones?" HacemosCuba analiza desde diversas ópticas, las conductas de desacato, desobediencia, resistencia y ate...
Razones de Cuba - Tomado de Cuba en Resumen
Lo último
La Columna
La Revista