Traducción de Manuel Talens - Cubainformación.- Salim Lamrani ocupa un lugar particular entre los autores: escribe sobre Cuba, mientras que la moda pavloviana exige que se escriba siempre contra Cuba, y lo hace con una precisión clínica y un rigor científico marcados por la originalidad: en cada una de sus afirmaciones, que van a contracorriente de las ideas publicadas, de las mentiras escupidas, de los trucajes, Lamrani proporciona sus fuentes, siempre superabundantes (más de 600) e irrefutables.

Su último libro, Cuba. Ce que les médias ne vous diront jamais , es una demostración implacable de una verdad ineludible: Cuba no es un paraíso, pero tampoco, de ninguna manera, el infierno que nos describen los medios occidentales. Salim Lamrani desmonta con precisión de relojero las mentiras, las censuras, los prejuicios, la saña, que sólo buscan perjudicar a ese pequeño país que ama al nuestro (Francia) desde hace siglos.

Es necesario que desenmascaremos esa perversa astucia periodística que consiste en crear imposturas con imágenes e informaciones verdaderas. Para hacerlo, basta con señalar sin interrupción lo que no funciona y con callar el resto. De esa manera, con ladrillos de verdades se va construyendo un muro de mentiras que oculta en la sombra el verdadero rostro de Cuba, mientras se ilumina su caricatura bajo la luz de proyectores que no se apagan jamás.

No es de extrañar que este libro se inicie con un prólogo de Nelson Mandela, hombre valiente que, apenas fue elegido a la presidencia de Sudáfrica tras su liberación de los calabozos racistas, no tardó en hacer su primer viaje oficial a Cuba, información que forma parte de eso que los medios no nos contarán jamás.