Un nuevo golpe acaban de recibir aquellos que se ilusionaban con un cambio en Estados Unidos.

Granma.- A la nueva ley antiinmigrante de Arizona, cuyo ejemplo amenazan con seguir otros estados como Nebraska, se suma, indica Notimex, la decisión de los conservadores republicanos, que dominan la Junta Estatal de Educación de Texas, de dar un giro netamente ultraderechista al programa de estudio en las escuelas de enseñanza secundaria y preparatoria.

De acuerdo con la fuente, los cinco millones de alumnos texanos no podrán leer palabras como esclavo y capitalismo en los textos que tratan la historia de Estados Unidos, amén de eliminarse otros vocablos como imperialismo, que tan mal le suena a la industria de la desinformación y lavado de cerebro de Washington, porque, según ellos, "le da mala imagen al país".

Para los elementos conservadores de la Junta, el esclavismo no es tal, sino un "Comercio Triangular del Atlántico" y el capitalismo tampoco, sino "un sistema de libre empresa".

En esa parafernalia ensalzan a entes retrógrados como Jefferson Davis, el líder de la esclavista confederación durante la Guerra Civil o de Secesión estadounidense, al que se señala como responsable de las muertes de 620 000 personas; en detrimento de Abraham Lincoln y John F. Kennedy, ambos presidentes asesinados por la reacción.

Toda una burla de los sectores más retrógrados de la sociedad norteamericana, expresada abiertamente por el presidente de la ultraderechista Junta Estatal de Educación de Texas, Don McLeroy, quien califica la aprobación de las normas de marras como un gran paso, lo cual es cierto, pero atrás en la historia. (Arnaldo Musa)