"Reconozco la habilidad y capacidad de sacrificio (de Mauricio Vicent) a la hora de entregar dinero a muchos entrevistados, para que no elogiasen a la Revolución”.

Carlos Tena - Blog de Carlos Tena.- Por fin, el gobierno cubano ha retirado la credencial de prensa al corresponsal de “El País” en Cuba, Mauricio Vicent, mientras los voceros de la manipulación  y la mentira, con Reporteros sin Fronteras (RSF) y la Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE) al frente, expresaron ayer su apoyo a este líder de la subjetividad, el rumor y el apoyo a figuras relacionadas con el terrorismo contra la isla más pacífica del globo.

Conozco a este personaje desde hace 30 años y desde que llegó a Cuba se mantuvo fiel a la hoja de ruta marcada por su superior de entonces, Juan Luis Cebrián, ex jefe de informativos del franquismo en RTVE, miembro del grupo Bilberderg, censor implacable al que los redactores obedecían sin rechistar so pena de ser expulsados e inmediato.

El Centro Internacional de Prensa, dependiente del Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba, sostiene que Vicent lleva transmitiendo una “una imagen parcial y negativa de la realidad cubana“, a lo que yo añado: Mauricio Vicent, en los 6 años que yo permanecí trabajando en La Habana, no hizo otras labores que manipular, mentir y ocultar cualquier aspecto positivo de la realidad cubana, aunque se tratara de logros referidos a los campos deportivos, de la medicina o la cultura.

Jamás salió de su ordenador otra crónica que la que denigraba, manipulaba y mentía, ocupándose en los últimos años de promocionar a Yoani Sánchez o a las Damas del Cheque en Blanco.

No obstante, reconozco su habilidad y capacidad de sacrificio a la hora de entregar dinero a muchos entrevistados, para que “no elogiasen a la Revolución”. Fue una verdadera pena constatar que un periodista que sabe redactar con tino y estilo, dedicara sus virtudes a ensalzar la falsedad y la mentira.

No obstante, Mauricio podría seguir residiendo en la isla ya que está casado con una ciudadana cubana y tiene dos hijos que, aunque nacidos en España, le otorgan el derecho a poseer el carné de residente.

Lo único que le faltaría son los 5.000 euros mensuales que recibe como “corresponsal”, aunque estoy seguro de que la solidaridad de Prisa con este tipo de profesionales, le permitirá seguir enviando crónicas desde la capital cubana; y sabrá aprovechar la retirada de ese permiso para aparecer ante los medios como un mártir de la información. Nada más lejos de la realidad.

Vicent no ha practicado en Cuba la objetividad, el rigor y el contraste de la noticia. Como miles de colegas, sus escritos seguirán al servicio de la mano que paga por no ser un corresponsal  ecuánime e imparcial, algo que sucede en RTVE y todas las cadenas y diarios nacionales.

No me solidarizo con su persona. Es más. Aplaudo la medida del gobierno cubano en toda su dimensión.