Arthur González - El Heraldo Cubano.- Parece que el sitio español “Diario de Cuba” no tiene un buen control de lo que publica, pues ha solo tres días de haber expuesto unas declaraciones del contrarrevolucionario cubano Guillermo “el Coco” Fariñas, donde le aseguró al propio Diario que se presentó el pasado 09.01.2012 en una Unidad de la Policía de su ciudad Santa Clara, junto a otros elementos contrarrevolucionarios y como “no los querían detener, empezaron a gritar consignas antigubernamentales para que los detuvieran” y finalmente lo hicieron”.
Ahora el mismo Diario de Cuba informó el 14.01.2012 que el congresista norteamericano de origen cubano, Mario Díaz-Balart, exigió la liberación de tres “disidentes” detenidos desde noviembre pasado por protestar contra la “pobreza” y el “hambre” en Cuba.
Díaz-Balart dijo que la detención de los opositores es otro “atroz recordatorio de la marcada depravación del régimen cubano”.
O sea que desde Miami dan las órdenes de ejecutar actos provocativos en la vía pública para que la policía se vea obligada a tomar medidas, y entonces poder desde allá iniciar las campañas mediáticas acusando a la Revolución de represión.
Tendrá mala memoria este congresista o es que desea hacerle creer a los lectores que lo que hacía su padre cuando era Ministro del Interior del asesino Fulgencio Batista, violador consuetudinario de los derechos constitucionales de Cuba y autor de las 20 mil muerte cubanas y cubanos, torturas y desapariciones, es lo que está pasando ahora en nuestro país.
Díaz Balart debe saber que después que el tirano Batista huyó de Cuba seguido de sus principales secuaces, entre ellos su padre, para refugiarse en los EE.UU. y otros países, se acabaron las violaciones de los derechos ciudadanos en nuestra patria. No hay un solo desapareció, torturado ni asesinado.
Es mejor que Mario se instruya un poco e incluso se lea el último informe de Amnistía Internacional sobre el tema Cuba, para que se entere que en los EE.UU. hay más violaciones y salvajes represiones contra los ocupantes de Wall Street, los inmigrantes mexicanos o los negros norteamericanos que en esta isla rebelde y libre del Caribe. Lo demás es pura campaña mediática como parte de las acciones de subversión diseñadas en la década de los ´60 por el gobierno yanqui y la CIA.
