Prensa Latina - Cubainformación.- El embajador de Cuba en España, Alejandro González, denunció la arrogancia de Estados Unidos por despreciar el clamor universal para poner fin al prolongado bloqueo económico, comercial y financiero impuesto a la isla.
En un artículo que lleva su firma, publicado hoy en la edición digital del periódico español El Mundo, el diplomático advirtió que esa política de asedio contra su país se intensificó durante el gobierno del recién reelegido presidente Barack Obama.
Resaltó que el carácter extraterritorial del bloqueo se recrudeció con la administración de Obama mediante la persecución y aplicación de sanciones a instituciones y empresas que intentaron comerciar con Cuba.
González detalló que en más de 50 años el daño económico causado por ese acoso unilateral a la isla caribeña asciende a un billón 66 mil millones de dólares, considerando la depreciación de esa divisa frente al valor del oro en el mercado internacional.
Aclaró, sin embargo, que esa cifra apenas se refiere a los perjuicios ocasionados a la economía y al pueblo cubano.
A ello habría que añadir los daños humanos y morales provocados por los actos terroristas organizados y financiados desde territorio norteamericano, con la anuencia de Washington y el involucramiento de agencias e instituciones oficiales, como ratifican los propios documentos desclasificados en Estados Unidos, subrayó.
Como muestra de esas afectaciones, el jefe de la legación de La Habana en Madrid mencionó el grave quebranto producido a la salud pública de esa nación antillana.
Según el embajador, de mayo de 2011 a abril de 2012 los perjuicios a ese sector fueron de unos 10 millones de dólares, debido al alejamiento de los mercados y el aumento de los precios de importación de material gastable e instrumental de uso médico.
Además, se refirió a la imposibilidad de adquirir medicamentos, reactivos, piezas de repuesto y equipos que esa isla no puede comprar en el mercado estadounidense como consecuencia del bloqueo.
A juicio de González, Obama continúa actuando como rehén de los grupos radicales minoritarios de origen cubano asentados en la Florida, que presionan por el mantenimiento de esa hostilidad.
Auguró, sin embargo, que su país tendrá una vez más el aplastante apoyo de la comunidad internacional frente a la soberbia de Washington, que ignora y desprecia el justo reclamo de poner fin a una política cruel y obsoleta que lesiona los derechos humanos del pueblo cubano y constituye el principal obstáculo para su desarrollo.
La Asamblea General de Naciones Unidas votará el venidero martes, por vigésimo primer año consecutivo, una nueva resolución sobre el informe la Necesidad de poner fin al bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por los Estados Unidos de América contra Cuba.
En 2011 sólo Estados Unidos e Israel se opusieron en la ONU a ese proyecto, en contraste con los 186 países que condenaron el hostigamiento norteamericano.
