Actos constantes de abuso policial contra afrodescendientes demuestran el racismo sistémico imperante en Estados Unidos, gran violador de los derechos humanos. Foto: AP - Video: Canal Caribe / TV Cubana.

Presidente de Cuba rechaza informe de EE.UU. sobre Derechos Humanos

CubaSí

El presidente Miguel Díaz-Canel calificó hoy de indigna, inmoral y mentirosa una reciente acusación del Departamento de Estado norteamericano sobre supuestas violaciones de los Derechos Humanos en Cuba.

Acuden a la infame retórica de siempre para calumniar a una isla heroica que sufre bloqueo criminal impuesto por el gobierno de EEUU, causando enorme daño al pueblo cubano. #CubaViva, escribió el mandatario en Twitter.

Indigna, inmoral y mentirosa acusación del Departamento de Estado norteamericano contra #Cuba. Acuden a la infame retórica de siempre para calumniar a una isla heroica que sufre bloqueo criminal impuesto por el gobierno de EEUU, causando enorme daño al pueblo cubano. #CubaViva pic.twitter.com/BP1nH7RAUh

— Miguel Díaz-Canel Bermúdez (@DiazCanelB) April 1, 2021

También el canciller Bruno Rodríguez, rechazó, 'por engañoso y politizado' ese informe: No podrá empañar el desempeño mundialmente reconocido de #Cuba y sus indicadores de justicia social, respeto y protección a los derechos humanos de nuestra población, apuntó en esa red social.

    Rechazamos por engañoso y politizado el Informe unilateral de #DDHH del Dpto de Estado EEUU.

    No podrá empañar el desempeño mundialmente reconocido de #Cuba  y sus indicadores de justicia social, respeto y protección a los derechos humanos de nuestra población. — Bruno Rodríguez P (@BrunoRguezP) April 1, 2021

Si al gobierno de EEUU le interesase defender los derechos humanos en #Cuba, pondría fin al bloqueo y a las más de 240 medidas de Trump que amenazan el bienestar y el sustento de 11 millones de cubanos.#NoMásBloqueo

— Bruno Rodríguez P (@BrunoRguezP) April 1, 2021

El texto elaborado por el Departamento de Estado es el primero publicado por la administración de Joe Biden, y acusa al gobierno cubano de supuestas restricciones al derecho de reunión pacífica, así como de libertad religiosa, trata de personas, entre otros señalamientos.

La víspera, el director del Centro de Política Internacional de Cuba, José Ramón Cabañas, afirmó que ese documento es un terrible inicio para el ejercicio de limpieza de la maltrecha imagen que dejó el Trumpismo por todo el planeta.

En su cuenta en Twitter, Cabañas recordó que Estados Unidos es el país 'con mayor población encarcelada, con más personas asesinadas por la brutalidad policial y con más población aborigen viviendo en refugios'.

Desde hace 40 años, el Congreso de Estados Unidos promulgó una ley que ordena al secretario de Estado preparar el documento y enviarlo al Congreso anualmente.

Los legisladores tienen en cuenta la información para diseñar leyes, aprobar la ayuda extranjera y tomar decisiones sobre políticas.

Cuba y el informe de Derechos Humanos

Por José Pertierra (*) / Colaboración Especial para Resumen Latinoamericano

Anthony Blinken, el secretario de estado del presidente Biden, publicó el 30 de marzo un informe sobre la situación de los derechos humanos durante el año 2020 en todos los países del mundo, menos (por supuesto) en los Estados Unidos

El informe fue preparado por el régimen de Trump y dirigido por su secretario de estado Mike Pompeo. Me pregunto por qué Blinken y Biden deciden publicar un informe sobre derechos humanos escrito por un gobierno neofascista y mentiroso. ¿Será porque se parecen más de lo que pretenden? ¿Qué ambos comparten la prepotencia de un país que se cree “excepcional”? ¿Qué los dos asumen ser los gendarmes del planeta?

El capítulo sobre Cuba está repleto de mentiras y calumnias. El Departamento de Estado no cita a las fuentes que ha utilizado para redactar el reporte. Pero las acusaciones parecen ser sacadas de las páginas de los periodicuchos que los Estados Unidos mismos financian con millones de dólares al año para tratar de lograr un cambio de régimen en Cuba.

Acusa a Cuba de torturar a sus presos, sin prueba alguna. Pero hace caso omiso a las voluminosas pruebas de fuentes fiables de que las víctimas de tortura en Cuba están en la base militar de EU en Guantánamo.

No menciona el bloqueo de Washington contra Cuba. Un cerco cuyo propósito principal es causar sufrimiento y hambruna en la isla para que los cubanos se rebelen contra la Revolución.

¿Con qué moral se atreven los Estados Unidos a sermonear al planeta sobre derechos humanos? ¿Qué derechos tienen los afroestadounidenses en su propio país? ¿Los indígenas? ¿Los latinos? ¿Los inmigrantes? ¿Los pobres?

¿Cómo se atreven a publicar un reporte de derechos humanos que ha sido redactado por un régimen responsable de la muerte innecesaria por el COVID de cientos de miles de estadounidenses? Cientos de miles que murieron, porque Trump se burló incesantemente de los que usan nasobucos. ¿No será una burda violación de los derechos humanos mentirle, como hizo Trump, al pueblo sobre el verdadero peligro del coronavirus?

¿No será una violación de los derechos humanos invertir millones de dólares para subvertir un país soberano como Cuba?

¿Cuándo aprenderán los Estados Unidos la lección que nos dejó Benito Juárez?

El respeto al derecho ajeno es la paz.

(*) Abogado cubano, experto en inmigración, que representó al gobierno de Venezuela para la extradición del terrorista Luis Posada Carriles. Tiene su bufete en Washington DC.

Rechaza Cuba informe de EE.UU. sobre derechos humanos

Prensa Latina

El director del Centro de Investigaciones de Política Internacional de Cuba, José Ramón Cabañas, rechazó hoy el más reciente informe de Estados Unidos sobre los derechos humanos en el mundo.

El texto, divulgado la víspera por el Departamento de Estado, en síntesis señala que la nación norteña es un faro de virtudes y el resto del orbe está muy mal, escribió en Twitter el exrepresentante cubano en Washington.

'Terrible inicio para el ejercicio de limpieza de la maltrecha imagen que dejó el Trumpismo por todo el planeta', agregó.

En otro mensaje, Cabañas recordó que Estados Unidos es el país 'con mayor población encarcelada, con más personas asesinadas por la brutalidad policial y con más población aborigen viviendo en refugios'.

El informe de 43 páginas, correspondiente al ejercicio de 2020, es el primero publicado por la administración de Joe Biden.

La información acusa al Gobierno cubano de supuestas restricciones al derecho de reunión pacífica, así como de libertad religiosa, trata de personas, entre otros señalamientos.

El documento aborda cada año los acontecimientos, casos de corrupción, denuncias de organizaciones y conflictos de cerca de 200 países de todo el mundo.

Desde hace 40 años, el Congreso de Estados Unidos promulgó una ley que ordena al secretario de Estado preparar el documento y enviarlo al Congreso anualmente.

Los legisladores tienen en cuenta la información para diseñar leyes, aprobar la ayuda extranjera y tomar decisiones sobre políticas.

Otro bochornoso panfleto de EE. UU. contra Cuba: No puede acusar quien castiga criminalmente

¿Cómo es posible que un nuevo gobierno en Washington mantenga la infame retórica contra países que, más que todo, sufren sanciones criminales aplicadas por ellos? Sabe muy bien la actual administración cuánto daño ha hecho a Cuba el criminal bloqueo impuesto durante seis décadas y recrudecido por el saliente mandatario Donald Trump

Elson Concepción Pérez

Granma

En mis lecturas mañaneras sobre «lo que ocurre en el mundo», me detuve en dos materiales periodísticos: un artículo del The New York Times, titulado ¿Qué pasó con los primeros detenidos de Guantánamo?, y un despacho de la agencia española EFE, que se refiere a un documento del Departamento de Estado norteamericano –de la actual administración demócrata– en el que se acusa a Cuba, Venezuela y Nicaragua, por no respetar los derechos humanos, y expresa «preocupación por las torturas y ejecuciones extrajudiciales que supuestamente se perpetraron en esos países».

¿Cómo es posible que un nuevo gobierno en Washington mantenga la infame retórica contra países que, más que todo, sufren sanciones criminales aplicadas por ellos? Sabe muy bien la actual administración cuánto daño ha hecho a Cuba el criminal bloqueo impuesto durante seis décadas y recrudecido por el saliente mandatario Donald Trump.

Pretenden engañar a alguien con esos cuentos, cuando saben todos –incluyendo quienes hoy vuelven con las acusaciones–, que si un ejemplo vivo de respeto a los derechos humanos hay en este hemisferio, es el de Cuba, la Isla digna que resiste y vence, la que no conoce, en época de Revolución, de torturas ni de muertes extrajudiciales.

De derechos humanos podemos hablar con la frente muy en alto, más cuando somos referencia mundial en todos los aspectos, como el pleno derecho universal a la educación y a la salud, de calidad y gratuitas, al trabajo remunerado  y a la plena garantía establecida por la Constitución, de ejercer el derecho libre al voto, de formar parte de instituciones sociales y de masas y de practicar la religión que cada cual prefiera.

En los últimos 60 años solo en un pedazo de Cuba, usurpado para la base naval en Guantánamo, se ha conocido la tortura, aplicada criminalmente por Estados Unidos, a través de su siniestra CIA y de otros mecanismos militares.

La Cuba a la que inculpan para «justificar» más sanciones asfixiantes contra nuestro pueblo, no ha conocido, en los años de Revolución, ningún caso como el del afroestadounidense George Floyd, asesinado por un policía blanco, o los de otros muchos fallecidos, también, debido al odio racial.

A ese gobierno que imputa deberían sentarlo en el banquillo de los acusados, porque en su país el racismo y la segregación son endémicas, en una sociedad que durante su historia ha excluido a millones de personas.

Tampoco se conoce aquí del fundamentalismo que inspiró el expresidente Trump para lanzar a sus adeptos a asaltar el Congreso, matar personas y secuestrar el resultado electoral.

¿Cómo es posible arremeter contra la Cuba ejemplo de solidaridad? Primero que nadie envió más de 50 brigadas médicas a 40 países, a combatir la COVID-19. En el mundo ha fallecido el 2,18 % de los pacientes infectados por esa enfermedad; en Cuba, señores acusadores, ese índice es de 0,56 %. Anteriormente, otras 55 formaciones del Contingente Henry Reeve habían colaborado en más de 59 naciones, incluyendo a los afectados por el Ébola.

¿Qué quieren justificar ahora, con estas acusaciones totalmente cínicas? Más sanciones económicas para que nuestro país no logre controlar la pandemia y ayudar a otros en el mundo. Quieren que Cuba no fabrique vacunas para salvar vidas.

¿De qué se trata? Del obstinado empeño siempre en hacer colapsar la Revolución Cubana, la Bolivariana de Venezuela y la Sandinista de Nicaragua.

Este panfleto bochornoso de EE. UU. chocará contra el muro de la verdad, de la solidaridad, de la dignidad hecha Patria: la de Cuba.