Con Filo.- El mundo nuevo exige soluciones nuevas y esas no las ofrece el capitalismo. El mundo necesita reparto: reparto del poder geopolítico, una distribución democrática entre los pueblos del planeta para que asumamos todos, con igualdad de condiciones, responsabilidades y atribuciones; un reparto más equitativo, más justo, de las riquezas que se crean socialmente y que nunca son resultado exclusivo de individualidades. El imperio estadounidense, no obstante su franca decadencia, sigue siendo el principal enemigo de ese nuevo mundo que debemos forjar. Nuestra responsabilidad, la de Cuba, no es solo resistir, sino aportar otra forma de ver la realidad social… nos toca repartir con tacto, mucho tacto. Porque ese reparto justo y limpio, ese reparto… sí que nos gusta.