Hoy ganó Cuba, pero también ganaron el ALBA y los pueblos que la integran, aseguró el dirigente de la Revolución Bolivariana, y reiteró su abrazo al Presidente cubano.
También hizo un breve análisis del éxito de la recién finalizada V Cumbre de la Alternativa Bolivariana para las Américas y proclamó: Fidel, tú eres el timonel.
Al comentar el desafío de este sábado, lamentó el golpe sufrido en la cabeza por Elier Sánchez durante la sexta entrada; pero aclaró que el estado de salud del lanzador abridor de la Isla es satisfactorio, pues recibió rápidamente atención médica.
Chávez explicó que conoce bien el terreno del estadio José Antonio Casanova del Fuerte Tiuna, pues allí practicó pelota durante su época de estudiante de la academia militar.
Aquí jugué como parte del equipo de los cadetes, y el profesor José Antonio Casanova era como nuestro padre, recordó con agrado.
También mencionó pasajes sobre sus inicios como pitcher, posición en la que se desempeñó, a pesar de presentar dolencias en su brazo de lanzar, y "en esos tiempos teníamos poca atención médica", comentó.
Mi condición de zurdo me salvó la vida como monticulista, aunque me probaron como jardinero y bateador, función en la cual lograba buenas conexiones, pero "halaba" mucho la bola, precisó.
Durante el dialogo con la prensa, rememoró el encuentro en La Habana con el equipo de béisbol dirigido por Fidel.
También hizo un breve análisis del éxito de la recién finalizada V Cumbre de la Alternativa Bolivariana para las Américas y proclamó: Fidel, tú eres el timonel.
Al comentar el desafío de este sábado, lamentó el golpe sufrido en la cabeza por Elier Sánchez durante la sexta entrada; pero aclaró que el estado de salud del lanzador abridor de la Isla es satisfactorio, pues recibió rápidamente atención médica.
Chávez explicó que conoce bien el terreno del estadio José Antonio Casanova del Fuerte Tiuna, pues allí practicó pelota durante su época de estudiante de la academia militar.
Aquí jugué como parte del equipo de los cadetes, y el profesor José Antonio Casanova era como nuestro padre, recordó con agrado.
También mencionó pasajes sobre sus inicios como pitcher, posición en la que se desempeñó, a pesar de presentar dolencias en su brazo de lanzar, y "en esos tiempos teníamos poca atención médica", comentó.
Mi condición de zurdo me salvó la vida como monticulista, aunque me probaron como jardinero y bateador, función en la cual lograba buenas conexiones, pero "halaba" mucho la bola, precisó.
Durante el dialogo con la prensa, rememoró el encuentro en La Habana con el equipo de béisbol dirigido por Fidel.