La raíz de las pérdidas por cosecha hay que buscarla en los contratos de producción entre productores y acopiadores, los cuales carecen de la objetividad y eficiencia necesarias para que esas relaciones contractuales fluyan positivamente.

Cuando una cooperativa tiene pactada una entrega determinada en fecha precisada de antemano y escrita en contrato, la empresa debe estar preparada para asumir su recepción.

Pero lo que está fallando son las relaciones contractuales entre campesinos y acopiadores, independientemente de que a veces la empresa especializada en comercializar esos productos sea la responsable.

Al parecer la diversificación de las cooperativas y la estructura del Ministerio de la Agricultura para atender estas organizaciones de ba-se, complica la realización de efectivos contratos. Por cada tipo de producto debe confeccionarse un documento. Digamos, si es carne de cerdo, con los del grupo empresarial porcino, si son viandas y hortalizas, con el de cultivos varios y así sucesivamente.
María del Carmen Concepción, miembro del Secretariado del Comité Central, señaló que hay que mejorar los contratos, sobre todo en la leche, donde existe una reserva entre lo que producen y lo que informan. Eso se comprueba ahora con el aumento del precio de la leche, apuntó, pues con la misma cantidad de vacas, se va a acopiar más.

Orlando Lugo, presidente de la ANAP, advirtió que aunque los pa-gos a las cooperativas marchan bien después de las medidas adoptadas, apuntó que a este tema no se le puede quitar la atención, pues sería una vergüenza volver a caer en atrasos.

En el tema de acopio de leche, Joaquín Lezcano, viceministro de la Agri-cultura, indicó que, entre enero y mayo de este año, disminuyó la leche acidificada en 350 000 litros, en relación con similar etapa del año anterior, lo cual atribuyó a la mayor disponibilidad de Stabilak, un conservante natural, y a la mejora en la recogida.

Explicó que si se incrementa la eficiencia en la reproducción se podría au-mentar hasta un 35% la entrega de leche. Un 18% de las hembras en reproducción a escala nacional están sin gestar. Además, de que hay 80 000 novillas que, por no alcanzar el peso adecuado, no pueden ser preñadas.
Sobre el tema del hurto y sacrificio ilegal del ganado, Lugo criticó el que se tranquen a los animales toda la noche para evitar a los bandidos matarifes. Los bovinos comen más pasto en el horario nocturno, y cuando hacemos eso se les quita su "gran cena".