Son muchas batallas simultáneas que requieren cohesionar las fuerzas para mantener la unidad del pueblo, principal arma de la Revolución, y la esencia está en aprovechar las potencialidades de una sociedad socialista como la nuestra, precisó.
Siempre que resulte racional es necesario recuperar la producción industrial nacional e incorporar nuevos renglones que eliminen importaciones o creen nuevas posibilidades de exportación, aseveró al comentar que una fuente casi inagotable de recursos está en el ahorro de combustible, que alcanza precios cada vez más altos.
Esta, recalcó, es una tarea de significación estratégica que no siempre cuenta con la atención necesaria.
Destacó también que en la actualidad se estudia el incremento de la inversión extranjera, siempre, precisó, que aporte capital, tecnología o mercado, para así aprovechar la contribución que esta pueda hacer al desarrollo del país, y los aportes positivos, sin repetir, alertó, los errores del pasado "por ingenuidades e ignorancia en esta actividad".
En este sentido añadió que se trabajará con empresarios serios y sobre bases jurídicas bien definidas que preserven el papel del Estado y el predominio de la propiedad socialista.
El Ministro de las Fuerzas Armadas Revolucionarias dijo que Cuba continuará fortaleciendo cada vez más la colaboración con otros pueblos, conscientes de que "solo unidos venceremos", y sobre la base del absoluto respeto del camino escogido por cada país.
Ejemplificó el avance alcanzado en las relaciones con Venezuela, Bolivia, y Nicaragua y los sólidos vínculos con China y Viet Nam, así como el creciente número de países de todos los continentes con los que se establecen y avanzan los vínculos de todo tipo.
Continuaremos, añadió Raúl, dando prioridad al Movimiento de Países No Alienados y al pujante movimiento de solidaridad internacional con la Revolución.
También seguiremos trabajando, señaló, con la Organización de Naciones Unidas y otros organismos multilatelares a los que Cuba pertenece que partan del respeto a las normas del Derecho Internacional y contribuyan al desarrollo de los pueblos y la paz.
Más adelante apuntó que las próximas elecciones del Poder Popular serán una nueva oportunidad de demostrar la extraordinaria fuerza de nuestra democracia, a la que calificó de verdadera.
En otro momento de su intervención señaló que es preciso no dejarse aplastar por ninguna dificultad por grande e insalvable que pueda parecer en determinada coyuntura, y recordó cómo el país pudo enfrentar los duros primeros años de Periodo Especial y salir adelante. Hoy como en aquella ocasión, dijo, "repetimos ¡Si se puede!".
Destacó que mientras mayor sea el problema o desafío debe existir más organización, más trabajo sistemático y efectivo, más estudio, y previsión a partir de una planificación basada en prioridades establecidas.
Además, añadió, se requiere trabajar con sentido crítico y creador, sin esquematismos; no creer que lo que hacemos es perfecto y no volverlo a revisar.
Lo único que jamás cuestionará un revolucionario cubano es nuestra decisión irrenunciable de construir el Socialismo, significó.
Recordó la "histórica y profética" afirmación de Fidel el 26 de julio de 1989 de que aun en el hipotético caso de que se desintegrara la Unión Soviética seguiríamos adelante con la Revolución, dispuestos a pagar el elevado precio de la libertad y de actuar sobre la base de la dignidad y los principios. La historia ha demostrado con creces esa decisión, afirmó.
Más adelante dijo que siempre debemos tener presente para aplicarlo diario y creadoramente, el concepto de Revolución expresado por Fidel el 1ro de Mayo del año 2000, una definición, resaltó, que constituye la quinta esencia del trabajo político e ideológico y citó:
"Revolución es sentido del momento histórico, es cambiar todo lo que debe ser cambiado, es igualdad y libertad plenas, es ser tratado y tratar a los demás como seres humanos, es emanciparnos por nosotros mismos y con nuestros propios esfuerzos, es desafiar poderosas fuerzas dominantes dentro y fuera del ámbito social y nacional.
"Es defender valores en los que se cree al precio de cualquier sacrificio, es modestia, desinterés, altruismo, solidaridad y heroísmo. Es no mentir jamás ni violar principios éticos, es convicción profunda de que no existe fuerza en el mundo capaz de aplastar la fuerza de verdad y las ideas.
"Revolución es unidad, independencia, es luchar por nuestros sueños de justicia para Cuba y para el mundo, que es la base de nuestro patriotismo, nuestro socialismo y nuestro internacionalismo.
El mejor homenaje al Comandante en Jefe en un día como hoy, la mayor contribución a su restablecimiento, aseguró, es ratificar la decisión de guiarnos siempre por esos principios y sobre todo actuar cotidianamente en consecuencia con ellos en el puesto que tenemos asignados.
Fieles al legado de nuestros muertos gloriosos trabajaremos sin descanso para seguir cumpliendo con lo orientado por Fidel en su Proclama y cuanta enseñanza nos imparta en lo adelante, expresó Raúl.
En medio de las dificultades nuestro pueblo no bajará jamás la guardia ante nuestros enemigos, concluyó.
