Prensa Latina.- El Comandante de la Revolución Ramiro Valdés afirmó hoy aquí que Cuba se encuentra en un momento de combate, en el cual debe perdurar el ejemplo del guerrillero Ernesto Che Guevara.

Estamos en una hora de combate, la que tiene que ser, por tanto, la hora del Che, proclamó Valdés en un acto por el aniversario 40 de la caída en combate del guerrillero, el cual estuvo presidido por el primer vicepresidente cubano, Raúl Castro.


Valdés indicó que en las reflexiones de Fidel Castro y en el discurso de Raúl Castro el pasado 26 de julio están las claves de lo que se debe hacer en el país, "para asegurar el camino de la Revolución".

Apuntó que la nación se ha convertido en un hervidero de ideas, a partir de la invitación realizada para que en cada centro laboral y de estudio las personas puedan plantear sus críticas o comentarios sobre los principales problemas que los aquejan.

Los planteamientos del Comandante en Jefe y las palabras de Raúl Castro en Camagüey estimularon un amplio intercambio en el seno del Partido, de los colectivos de trabajo, de las organizaciones políticas, de masas, juveniles y estudiantiles, aseguró.

Consideró que dichas discusiones pueden aportar una mayor comprensión de los problemas, la búsqueda masiva de soluciones que "no podrán ser nunca mágicas y que tienen que basarse en el trabajo".

Asimismo, sugirió tener en cuenta durante las reuniones la capacidad del país para generar recursos y el bloqueo impuesto por Estados Unidos, que le ha provocado pérdidas al país por más de 89 mil millones de dólares en los 48 años de vigencia.

Lo que esperamos de este debate –precisó Valdés- es que nos ayude a romper con la inercia, el dogmatismo y el sentido burocrático, así como a desarrollar el enfoque creador y liberar, donde estén trabadas, las fuerzas productivas.

También se mostró esperanzado en que el proceso ayude a que surja una costumbre de revisar y actualizar críticamente las fórmulas aplicadas en la economía y distintas esferas de la vida para que se correspondan con las realidades cambiantes del país.

Alertó que los problemas se resuelven con ideas, imaginación y conciencia, pero también con recursos, "por lo que todo no se puede hacer de una vez, ni todas las necesidades planteadas podrán ser resueltas de manera inmediata".

Nuestra agenda es hacer cuanto resulte sensato y posible, eliminar lo que sea absurdo, conciliar cada logro y asegurar cada día más la plena soberanía del país, subrayó el dirigente.

En otra parte de su discurso, Valdés recordó la llegada de los restos del Che y sus compañeros de lucha en 1997 al mausoleo donde se realizó el acto de este lunes, los que fueron calificados entonces por Fidel Castro como un destacamento de refuerzo.

El también ministro de la Informática y las Comunicaciones fustigó al presidente estadounidense, George W. Bush, a su política guerrerista, y a los precios del petróleo, alimentos y mercancías de todo tipo, que ponen en aprietos a los países pobres.

Ante este panorama, conminó a las nuevas generaciones de cubanos a continuar aprendiendo de la vida del legendario guerrillero e imitar su ejemplo y determinación de defender el proceso socialista, al cual consideró irrenunciable.

El legado del Che no es una página de la historia que debemos recordar sino un ejemplo vivo que debemos tener presente a diario, ratificó el dirigente ante pobladores reunidos en el acto.
 

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