Adelina Vázquez Noriega - AIN.- Carlos Lage Dávila, vicepresidente del Consejo de Estado, recorrió hoy la fábrica de pienso líquido, la Empresa Conformadora y la productora de ómnibus Evelio Prieto, de la provincia de La Habana.

Recalcó el esfuerzo realizado en estos centros y otros del territorio y del resto de Cuba, y exhortó a trabajar para reducir los costos, el gasto de combustibles y demás recursos, y hacerlo a la mayor velocidad posible, por la compleja situación que vive el mundo.

El también miembro de Buró Político del Comité Central del Partido Comunista de Cuba, destacó que en la Conformadora de Guanajay comenzó la remotorización, vital en estos momentos cuando el precio del barril de petróleo ronda los 115 dólares y la tendencia es a subir aceleradamente.

Para disminuir el consumo de combustible, se sustituyen los motores altamente consumidores por los procedentes de China, más modernos y de bajo consumo, significó e informó que ya llegaron al país los primeros 12 mil y se inició el proceso de retirar de la circulación los camiones gastadores y remotorizarlos.

En la planta Evelio Prieto, precisó que Cuba ha adquirido cinco mil ómnibus de ese país asiático, de gran calidad y más modernos, que irán llegando en cuatro o cinco años, pero entre 600 y 800 se ensamblarán en la Isla, con asesores y técnicos de la entidad productora.

Sobre los alimentos, manifestó que existe también una situación económica internacional compleja, más difícil en el caso de los países subdesarrollados por el incremento de los precios, los cuales se han multiplicado en muchos productos, triplicado en la leche y cuadruplicado en el arroz.

Expresó Lage que la única forma de enfrentar este panorama es trabajar, producir con más ahorro, eficiencia y menos costo, además de sustituir la mayor cantidad de importaciones posible.

Ejemplificó con el caso de la carne de cerdo que, si se importa, cuesta unos dos mil 200 dólares la tonelada, mientras que producirla en el país demanda menos de mil 400 dólares.

Una prioridad en los planes porcinos -dijo- son las inversiones para incrementar la producción y reducir los daños ambientales, además de resolver problemas de comercialización.

En la fábrica de pienso, recordó que es parte de un programa que impulsó el líder de la Revolución, Fidel Castro; después no se pudo continuar, pero ahora se rescata por sus beneficios: le da valor a los desechos, resuelve un problema de contaminación y se convierte en un alimento animal de calidad que ahorra importaciones, como la soya.