Prensa Latina.- Dos estrellas del jazz, los pianistas cubanos Chucho Valdés y Gonzalo Rubalcaba, protagonizaron hoy en esta ciudad un concierto memorable.

Una velada mágica según la definió Valdés a Prensa Latina al término de la actuación.

Estambul consiguió hacer un paréntesis en las giras europeas de los más grandes pianistas de jazz que ha dado la Isla, atraídos por una ciudad y un público que acogieron espléndidamente el repertorio de profundas reminiscencias cubanas.

Chucho Valdés y su grupo abandonaron por unas horas España, donde se encuentran presentando en compañía del cantante Pablo Milanés su último trabajo discográfico, movido por un impulso muy especial, explicó Valdés a Prensa Latina.

Estambul me gusta mucho, he estado varias veces aquí y su público ofrece un calor y un apoyo muy grande al artista, por eso siempre me gusta volver, añadió.

El concierto presentó dos partes, una más íntima y sincopada en la que se pudo disfrutar de la calidad artística de Rubalcaba, la segunda de la mano de Chucho Valdés, vibrante y movida a ritmo cubano y donde Mayra Caridad Valdés mostró su prodigiosa voz.

El final, improvisado y reclamado por una larga ovación del público, juntó las cuatro manos de los pianistas en una pieza que será difícil de olvidar para el púbico que abarrotaba la sala del Is Sanat.

Un viaje rápido que ha valido la pena, un concierto mágico, declaró Chucho Valdés al finalizar.

Pienso que hemos vivido un momento precioso, pues ha habido mucha complicidad entre el público y los músicos, recalcó, para mi ha sido como una inyección que te anima el espíritu para seguir, creo que es lo mejor que me ha pasado en los últimos tiempos.

Tremendamente complacido por la respuesta de los espectadores, el pianista cubano no dudó en asegurar que se había sentido como si hubiera dado el concierto en La Habana, ha sido igualito de como estaba esto de bueno.