La actriz británica Vanessa Redgrave consideró hoy a Cuba un ejemplo de resistencia y perseverancia y destacó los logros de la isla en la educación.

Prensa latina/kaosenlared.- El estado cubano tuvo desde sus inicios como prioridad el derecho a la educación y la salud, algo que todos los gobiernos deberían hacer. Si siguieran estos pasos el mundo cambiaría, afirmó en rueda de prensa en la Sala Taganana del Hotel Nacional.

Redgrave volvió a La Habana después de 45 años para exhibir en el 30 Festival de cine La fiebre, de su hijo Carlo Nero, en la que trabaja como protagonista principal y productora.

Es muy difícil expresar de forma breve lo que siento por esta isla. Cuando viajé por primera vez en 1963 vi como casas de personas poderosas se convertían en escuelas, recordó.

Esa experiencia cambió para siempre mi vida y fundé un pequeño centro escolar en Londres para niños entre tres y cinco años, añadió.

Ahora regresé y fui hoy a una de esas escuelas. Encontré allí una gran gentileza y humanismo de estudiantes y profesores cubanos, resaltó.

Interrogada sobre su opinión acerca de los derechos humanos en el mundo, respondió que Cuba también es uno de esos ejemplos pese a las dificultades que ha enfrentado. Esto que sucede aquí es algo real, acotó.

La actriz rememoró su experiencia junto al fallecido cineasta italiano Michelangelo Antonioni, con quien rodó la segunda película de su trayectoria, Blow up, en 1966.

Trabajar con él fue una de las cosas más maravillosas que me ha sucedido, aprendí mucho y esa conexión que tuvimos nunca más la he logrado con ningún director. Antonioni sabía exactamente lo que quería, las formas, los espacios, los colores, subrayó.

Aplaudida en 1968 por su papel de Isadora Duncan, que le valió una nominación al Oscar, expresó que esa bailarina revolucionó la danza en muchos sentidos. Era pobre y tenía un espíritu de lucha grande, opinó.

Redgrave aprovechará su estancia en Cuba para rodar un documental sobre su retorno a La Habana.