Guillermo Nova, corresponsal de Cubainformación en La Habana.- Durante su discurso de clausura del noveno congreso de la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC), el presidente de Cuba Raúl Castro, afirmó que ante las presiones de Estados Unidos y especialmente de Europa, "no cederemos jamás al chantaje, de ningún país o conjunto de naciones por poderosas que sean, pase lo que pase. Tenemos derecho a defendernos", expresó.
Castro denunció que en la actualidad está en curso "una descomunal campaña de descrédito contra Cuba enarbolando hipócritamente las banderas de los Derechos Humanos” y criticó el doble rasero de quienes “guardan cómplice silencio frente a las torturas en la llamada guerra contra el terrorismo y permitieron vuelos clandestinos de la CIA”.
Por ello si “pretenden acorralarnos, sepan que sabremos parapetarnos, en primer lugar en la verdad y los principios. Una vez más seremos firmes, serenos y pacientes. Sobran los ejemplos en nuestra historia", advirtió.
Cuadros de probeta
A los jóvenes delegados presentes les aconsejó que deben convertirse en dirigentes capaces de llevar a cabo una labor ideológica efectiva, “que no puede ser diálogo de sordos ni repetición mecánica de consignas” para ello deben saber escuchar y manejar argumentos sólidos.
Pero también tuvo palabras críticas a errores cometidos en el pasado reciente con la política de cuadros que creó algunos que estuvieron distanciados de la realidad social que viven los cubanos de a pié, a estos los calificó de “cuadros de probeta o de laboratorio”, por ello destacó la necesidad de “formar líderes de verdad, no improvisados, que hayan pasado por la insustituible forja de la clase obrera, en cuyo seno se cultivan los valores más genuinos de un revolucionario” afirmó.
Potenciar la economía
En su intervención Raúl destacó como la tarea principal del país la mejora de la economía porque de ella depende la sostenibilidad y preservación del sistema social cubano, “sin una economía sólida y dinámica, sin eliminar gastos superfluos y el derroche, no se podrá avanzar en la elevación del nivel de vida de la población, ni será posible mantener y mejorar los elevados niveles alcanzados en la educación y la salud que gratuitamente se garantizan a todos los ciudadanos”, afirmó.
Para ello puso en el centro del debate el aumento de la producción agrícola que evite las sangrantes importaciones para las arcas públicas, sobre todo de productos que se pueden producir en el país, pero también que sirva como nuevo modelo productivo, garantizando la soberanía alimentaria.
