Diony Sanabia Abadia - Prensa Latina.- Habituados a calurosos registros de temperaturas durante la mayor parte del año, cubanos del occidente del país acuden hoy a ropas de invierno para pasar el primer frente frío de la actual temporada. Una mirada por varios barrios de esta capital permite constatar las más variadas combinaciones de pantalones, camisas y blusas de mangas largas, abrigos de todo tipo, gorros y hasta bufandas.

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Muy cerca del Malecón habanero, donde la brisa se siente ahora más fuerte, la mayoría de los caminantes pasean con sus manos dentro de los bolsillos y algunos llevan guantes para protegerse.

Al fin llegó el invierno, exclama una minoría en el intento de encontrar voz entre quienes prefieren perpetuar el adagio de que Cuba es un eterno verano y exhibir partes de su cuerpo sin temor al estado del tiempo.

Más allá del gusto por utilizar otras prendas de vestir a las acostumbradas, los cubanos tienden a llevar mucha ropa al sentir el más mínimo descenso en los termómetros, coincidieron tres jóvenes al parecer muy calurosos.

Para unos, el calor resulta lo mejor y varios baños de agua fresca al día constituyen la solución; para otros, nada como el invierno y la obligación de estar perfectamente abrigados.

Amantes del contrapunteo, los habitantes de la mayor de las Antillas no se ponen de acuerdo en preferencias climáticas, y hasta en las propias familias se encuentran extremos opuestos.

Por eso, y aunque el frío es el mismo para todos, en estos momentos se puede encontrar a dos personas tomadas de la mano mientras una de ellas se arregla la bufanda y la otra se queja de cargar con un abrigo por recomendación de su "media naranja".