Instituida en 1960, la fecha rinde homenaje a una frase del líder de la Revolución cubana Fidel Castro, quien en aquella ocasión expresó: "El futuro de nuestra Patria tiene que ser, necesariamente, un futuro de hombres de ciencia, de hombres de pensamiento".
Desde entonces esta rama ha tenido un desarrollo vertiginoso en Cuba, con disímiles proyectos investigativos encaminados a la preservación medioambiental, mejorar la salud humana y el desarrollo técnico.
El año recién concluido aportó relevantes avances en el campo sanitario, con la puesta en práctica de nuevos productos, entre ellos, la vacuna terapéutica contra el cáncer avanzado de pulmón y la antimeningocócica no conjugada contra los grupos A y C.
Otros significativos en este sector son el fármaco antihemorroidal con estreptoquinasa recombinante y el interferon alfa, según datos recientes de especialistas del Ministerio de Ciencias, Tecnología y Medio Ambiente.
Instituciones científicas de toda la isla se unieron a los festejos con variadas propuestas, sobre todo educativas, para estimular el conocimiento y fomentar el cuidado y preservación del entorno.
Entre las más atractivas se encontraron las organizadas por el Museo de Historia Natural de la Oficina del Historiador de la Ciudad, con charlas, conversatorios y conferencias.
Proyección de audiovisuales didácticos, intercambios con académicos y la inauguración de exposiciones centradas en la temática científica completaron el programa.
Las celebraciones por el Día de la Ciencia Cubana se insertan en el Año Internacional de la Química, instituido por las Naciones Unidas por los logros de esta rama para el bienestar de la Humanidad.
También es un tributo a la científica polaca Marie Curie (1867-1934) descubridora de la reactividad y primera mujer merecedora de dos Premios Nobel. El primero de ellos en 1902 por dicha investigación y el otro lo conquistó ocho años después por hallar los elementos químicos radio y polonio.
