Antonieta César - CubaTrabajadores.- A la entrada del puerto de La Habana las antiguas fortificaciones construidas durante la colonia enfrentaron impertérritas el paso de los siglos, sus muros que el tiempo convirtió en símbolos, albergaron diversas instalaciones y dependencias; hoy uno de ellos, el Museo Complejo Militar Morro-Cabaña se ha convertido en sede de una favorecida cita cultural: la Feria Internacional del Libro.

Hasta el año 2000, el esperado encuentro se movió por diversas áreas, pero el nuevo siglo traía aires de asentamiento y convirtió el lugar en sede habitual. Consecuentemente el espacio se ha ido acicalando y adaptando a un uso también apropiado a las posibilidades que ofrece.

Para esta XX ocasión continuaron intensificándose cambios y adaptaciones, especialmente la redistribución del lugar dedicado a las librerías que no resultó fácil, pero daría más comodidad al desplazamiento del público, cada vez más numeroso.

Esta modificación requería nuevas estructuras e incluir en forma destacada la conmemoración de bicentenario y el esencial respaldo a las culturas originarias -también con relevancia actual- lo cual envolvía planes inversionistas significativos.

El montaje adecuado, que precisaba partes metálicas y paneles para los stands, contó con la cooperación de la empresa ecuatoriana COMEFEX, y en los trabajos participaron especialistas: diseñadores, guionistas e investigadores del Instituto Cubano del Libro (ICL) quienes funcionaron coordinadamente para lograr un uso más racional de los sitios disponibles.

Se calcula que sólo de casas editoriales cubanas se presentan más de 600 títulos nuevos y la cifra total con todas las firmas participantes supera los dos mil.

En la sección destinada a expositores invitados de honor que cubre unos mil metros cuadrados, se incluyen las salas Bicentenario y Nuestra América, con muestras de los ocho países del ALBA: Ecuador, Bolivia, Venezuela, Nicaragua, San Vicente y Granadinas, Dominica y Barbuda, Antigua y Barbados. Argentina, Paraguay y Uruguay, tienen participación destacada en esa sección.

La sala con la epopeya bicentenaria es de las más visitadas. Exhibe un bosquejo de los proceso históricos hasta nuestros días y consta entre otros pensadores con textos de Marx, Bolívar, Martí, Neruda, Toussaint L´Ouverture, Mariátegui, Mella, Sandino, Raúl Roa y nuestro Cmdte en Jefe Fidel.

Muy completo, este trabajo responde al guión del doctor Sergio Aguirre Vilaboy, asesoría de la doctora María Dolores Ortiz y la producción de Walfredo Sánchez.

Esta nueva edición de la feria está siendo muy exitosa, es el mayor evento cultural del país y los asistentes no hallan solamente libros, también hay conciertos, conferencias, programaciones infantiles.

De fortaleza colonial a recinto ferial, la construcción de más de cuatro siglos se extiende en una concepción arquitectónica recuperada para función diferente y deja ver, no sólo tesoros, como estos de papel de la feria literaria, sino desde su ángulo privilegiado, a un costado de la bahía una impresionante conjunción de cielo y mar.