Prensa Latina.- Cuba denunció ante el Consejo de Derechos Humanos (CDH) de las Naciones Unidas el resurgimiento del racismo, la discriminación y la xenofobia en algunos países, sobre todo en el norte industrializado.
A propósito de un debate sobre el tema en el CDH, el delegado cubano Juan Antonio Quintanilla recordó que 10 años después de la Conferencia de Durban aún está pendiente la plena aplicación de su Declaración y el Programa de Acción."Persisten la creación de asociaciones y partidos políticos con una plataforma racista, xenófoba y anti-inmigrante. Prevalece la exclusión social y la marginación de los pueblos, etnias, minorías u otros grupos sociales e individuos", argumentó Quintanilla.
El diplomático recalcó que proliferan las políticas y leyes migratorias discriminatorias, que afectan a millones de personas procedentes de América Latina, Asia y África, "a diario vejadas en sus derechos".
Asimismo subrayó que se adoptan e implementan leyes antiterroristas que facilitan amplios espacios a la arbitrariedad y al ejercicio de la autoridad pública sobre bases estereotipadas, racistas y xenófobas.
Cuba destaca la importancia de la labor del Grupo de Trabajo Intergubernamental sobre la aplicación efectiva de la Declaración y el Programa de Acción de Durban, y apoya también los trabajos del Comité Especial sobre la elaboración de normas complementarias.