Lilieth Domínguez Quevedo - AIN.- Científicos del Centro de Investigaciones Marinas (CIM), de la Universidad de La Habana, se dedican hace 14 años al estudio de las tortugas marinas, con mayor empeño por estos días cuando desovan en costas cubanas.

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Hugo Valdés, director de esa institución fundada en 1970, afirmó en exclusiva a la AIN que aún cuando tales especies en peligro de extinción son una fuente importante de recursos para las comunidades humanas costeras, persiste la explotación indiscriminada y destrucción del hábitat.

Esto ha provocado la declinación de muchas de sus poblaciones, subrayó Valdés, en un evento internacional sobre manejo de costas realizado en la ciudad santiaguera.

Sin embargo, destacó que en la Península de Guanahacabibes, en Pinar del Río, el trabajo de educación ambiental y las acciones de monitoreo para proteger el desove y evitar su extinción, permiten afirmar que las especies que allí anidan, principalmente tortugas verdes y caguamas, gozan de buena salud.

Entre los meses de mayo y septiembre las tortugas hembras avanzan hacia playas seleccionadas, donde escarban un hueco en la arena y colocan allí hasta un centenar de huevos.

Según los especialistas, existe un ciclo de variación bianual que hace que en los años impares, el número de huevos depositados sea significativamente menor a los años pares.

Sobre el tema Osmany Borrego, responsable del programa de uso público y educación ambiental del parque Nacional Guanahacabibes, habló recientemente de un entrenamiento con trabajadores de esa instalación y guardabosques, dirigido por el CIM, para el monitoreo de dichos quelonios.

Según la página web del periódico Guerrillero, de Pinar del Río, el próximo 22 y hasta finales de agosto, educandos de la Facultad de Biología de la Universidad de La Habana se incorporarán al estudio en la citada Reserva de la Biosfera, conjuntamente con los vecinos de la zona.