Durante su habitual Enlace ciudadano de cada sábado, ese día desde la localidad de Durán, en la provincia costera de Guayas, Correa dijo que el Ministerio de Salud Pública invertirá mil 300 millones de dólares en medicinas, que se adquirirán en primer lugar en la industria nacional y las que no sea posible producir aquí serán compradas a Cuba.
Solo aquellas que la nación caribeña no produzca o exporte, serán sometidas a licitación internacional, explicó el mandatario. Correa señaló que Cuba ofrece medicamentos reconocidos mundialmente, pero además esa decisión constituye un gesto de reciprocidad hacia la cooperación que La Habana ha brindado a Ecuador en ese campo. Puso como ejemplo el apoyo de especialistas cubanos a la importante Misión Manuela Espejo, para identificar y brindar todo tipo de ayuda a las personas discapacitadas, así como la formación de miles de jóvenes ecuatorianos de las familias más humildes, como médicos en la Escuela Latinoamericana de Medicina (ELAM).
Señaló que el contingente de ecuatorianos es uno de los mayores de la ELAM, pero además figuran entre los alumnos más sobresalientes, lo cual constituye un orgullo para el país.Y lo más importantes es que esos jóvenes no regresarán, ya graduados, para ofrecer consultas a 80 dólares, sino para atender las necesidades de la población de los lugares más apartados y necesitados de la nación, puntualizó.
Criticó que la compra de medicinas a Cuba no se hubiera hecho con anterioridad por la existencia aquí de una burocracia que favorecía las compras a las transnacionales farmacéuticas a cambio de prebendas. Por ello, añadió, por decisión gubernamental se cambiará esa situación y se acudirá al mercado cubano, que puede ofrecer productos de excelente calidad, y retribuir la solidaridad permanente de la isla con los ecuatorianos.
