Mayte María Jiménez - Juventud Rebelde.- A la luz de 140 años, los estudiantes cubanos honraron su historia, su identidad y su futuro, porque Cuba es y será siempre revolucionaria.



Esta fue la premisa que guió a los miles de jóvenes que marcharon este 27 de noviembre a lo largo de la calle San Lázaro, desde la Escalinata de la Universidad de La Habana, hasta el Mausoleo erigido a los ocho estudiantes de Medicina, en la capital.

Como es tradición, los estudiantes rindieron tributo a los ocho estudiantes de medicina que fueron fusilados en el año 1871 por el colonialismo español, solo por sentirse cubanos y dignos de defender a esta Isla. Así quedó registrado ese momento en la historia, como el inicio del proyecto de identidad, integración y unidad que ha guiado a las generaciones de cubanos, para conquistar su presente y su futuro.

Lisara Corona, vicepresidenta nacional de la Federación Estudiantil Universitaria, (FEU) reafirmó el apoyo de la juventud y el estudiantado cubano a la Revolución, y a todas las transformaciones que vive el país, para perfeccionar nuestro sistema social.

Destacó también el sentir de los estudiantes a favor de la liberación de los Cinco Héroes, que no será real hasta que todos puedan regresar a casa; y subrayó el apoyo al movimiento del estudiantado latinoamericano, en pos de una educación gratuita y de calidad.

Armados con banderas los jóvenes fueron los protagonistas de la marcha, que abrió con un bloque con más de 7 000 estudiantes de la Universidad de Ciencias Médicas, seguidos por el resto de los universitarios y los alumnos de la Federación de Estudiantes de la Enseñanza Media.

Como ellos, a lo largo de toda la Isla, se desarrolló durante estos días una jornada de actividades de recordación y homenaje que contó con la realización de matutinos especiales y bastiones universitarios, y desde horas tempranas de este domingo una marcha a las plazas principales.

Juan Pascual Rodríguez, José de Marcos Medina, Anacleto Bermúdez, Eladio González, Carlos Augusto de la Torre, Carlos Verdugo, Ángel Laborde y Alonso Álvarez de la Campa, eran los nombres de los ocho estudiantes de primer año de medicina que fueron asesinados injustamente hace 140 años.

A ellos les fueron colocadas, en horas tempranas de la mañana, ofrendas florales en el Cementerio de Colón, y en el Mausoleo, en La Punta, a nombre del Comandante en Jefe Fidel Castro; Raúl Castro, presidente del Consejo y de Ministro, los Consejos de Estado y de Ministros; y de la FEU.

La marcha fue presidida por Miguel Díaz Canel, miembro del Buró Político y ministro de Educación Superior, Roberto Montesinos Pérez, jefe del departamento de Educación y Deportes del Comité Central del Partido, Olga Lidia Tapia, primera secretaria del Partido en La Habana, Ena Elsa Velásquez, ministra de Educación, Roberto Morales, ministro de salud, y Liudmila Álamo Dueñas, primera secretaria de la Unión de Jóvenes Comunista.

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