Marianela Martín González - Juventud Rebelde.- «Siempre el Partido, Fidel y Raúl tendrán en esta Asamblea una trinchera inclaudicable. Siempre seremos dignos de aquello que quería Martí: “Que la primera ley de la República sea el culto de los cubanos a la dignidad plena del hombre”».
Con este voto de confianza, Jaime Crombet, vicepresidente del Parlamento, concluyó el acto por el aniversario 35 de la constitución de la Asamblea Nacional del Poder Popular, celebrado este viernes en la sede del órgano legislativo.
Crombet destacó que la efeméride coincide con los 55 años del desembarco del yate Granma y el Día de las Fuerzas Armadas Revolucionarias, por lo que es una fecha excepcional para reafirmar que nuestro Parlamento seguirá siendo garante del poder del Estado y la voluntad soberana del pueblo.
El Vicepresidente de la Asamblea Nacional significó la convergencia de la celebración con el nacimiento de la CELAC en la hermana República Bolivariana de Venezuela. Felicitó a los trabajadores de la Asamblea, principalmente a los que cumplen los mismos años de constituido el órgano de Gobierno. Encomió la labor de Tomás Cárdenas y Faure Chomón, quienes arriban, al igual que Crombet, a los 35 años como diputados.
Cristóbal Caballero Santana, secretario de Comité del Partido de la Asamblea Nacional, al resumir los 35 años del órgano gubernamental, destacó la Tercera Ley de Reforma Constitucional, la cual tuvo como antecedente un plebiscito popular que definió y estableció que el socialismo en nuestro país es irrevocable.
La lucha por la liberación de los Cinco que libra la Asamblea Nacional del Poder Popular, encabezada por su presidente, Ricardo Alarcón, también fue destacada en esta ocasión.
Detrás del esfuerzo de nuestro Parlamento por refrendar el poder del pueblo hay miles de personas anónimas y algunas, como Néstor Martínez y Rita Pagés, que han dedicado casi toda su vida —35 años— a lograr ese objetivo. Por eso este viernes recibieron diplomas de reconocimiento al igual que aquellos que llevan 20, 25 y 30 años de manera ininterrumpida trabajando en la Asamblea Nacional.
