García, de 68 años, expresó en declaraciones a Prensa Latina su satisfacción por el lauro, el cual constituye, ante todo, una gran motivación para seguir trabajando e intercambiando con sus colegas más jóvenes.
El acta del jurado -leída por el presidente del tribunal, Carlos Pérez Peña-, resaltó su amplia trayectoria artística como histrión, autor y director teatral; su perenne voluntad de actualización y su ejemplo inspirador para las nuevas generaciones.
Precisamente, el artista -envuelto en las presentaciones de Aire Frío, obra clásica del cubano Virgilio Piñera- manifestó que intenta cada día trasladar toda su experiencia y el legado de sus maestros (las actrices Berta Martínez y Raquel Revuelta, y el director Vicente Revuelta) a los noveles teatristas de la isla.
"No creo en guerras generacionales", recalcó, sino en la "complementación" creativa.
Reafirmó asimismo su idilio permanente con el arte de las tablas, que "no da dinero, ni fama, solo el placer prodigioso de la comunicación directa con el público", apuntó.
Para Pancho García, el teatro es una manifestación raigal, pues baja a las profundidades de la existencia humana; y debe entretener, pero, sobre todo, educar y reflexionar acerca de los conflictos de cada momento en la vida de una nación.
Consideró haber tenido mucha suerte en su carrera, que le permitió asumir roles protagónicos en obras como Macbeth, de William Shakespeare; Bodas de Sangre, de Federico García Lorca; Stockmann, un enemigo del pueblo, de Henrik Ibsen; Madre Coraje y sus hijos, de Bertolt Brecht, y Vida y muerte de Pier Paolo Passolini, de Michel Azama.
Por último, García lamentó la muerte de uno de sus grandes maestros, Vicente Revuelta -director del legendario Teatro Estudio-, ocurrida la víspera, en la misma jornada en que supo de su lauro: "ese es el vaivén de la vida".
Tras darse a conocer el galardón, Carlos Celdrán, director de la compañía Argos Teatro -donde en la actualidad trabaja García- señaló el "claroscuro" de esta jornada, en la que coinciden la inhumación de uno de los padres de este arte en Cuba y el homenaje a otro gran artista.
"Extraña transición...tan teatral", exclamó el crítico cubano Omar Valiño.
El Premio será conferido oficialmente el próximo 22 de enero, día del Teatro Cubano, en una gala que acogerá la sala habanera Hubert de Blanck.
