Por Pedro Juan de la Portilla Cabrera*/ Martianos-Hermes-Cubainformación-Cubasolidaridad.- El pasado 25 de abril se presentó en Mérida la premiere de dos documentales: "Trova de oro", uno sobre el Trío Matamoros y otro dedicado a Ñico Saquito.

El cubano Rubén Gómez Neyra, especialista en Historia del Arte y  quien fuera durante 14 años Director de la Casa de la Trova de Santiago de Cuba, hizo mancuerna con la estadounidense Cynthia Biesteck en la producción y dirección, para presentarnos su ópera prima en Mérida del género documental con los  cortometrajes: "Trova de oro", dedicados a dos de las figuras emblemáticas del son cubano: Nos referimos al famoso Trío Matamoros y al  incomparable Ñico Saquito.

En cada uno de los documentales de 30 minutos aproximadamente, se recrean las figuras de los protagonistas, a través de anécdotas de dos familiares que hablan, no sólo de los logros musicales, sino del lado humano  de estas figuras antológicas de la Trova santiaguera, en el entorno citadino de la Cuna del Son cubano.

La cámara se mueve en primeros planos con los que cuentan la historia, y nos muestra la forma extrovertida y la chispa del santiaguero para improvisar en la música y en la conversación. Quizás, desde mi perspectiva, debió aprovecharse  mejor la fotografía en cuanto a las hermosas imágenes que nos brinda la Bahía de Santiago y su complejo arquitectónico amurallado que es Patrimonio de la Humanidad e incluir comentarios de otros trovadores que aún viven en Santiago y no reiterarse en  los primeros planos de las entrevistas a sólo dos familiares en ambos documentales.

La inclusión del Historiador de la música  y periodista, Lino Betancourt, toda una personalidad de la musicografía en Cuba, le brinda un soporte importante  a la exposición de los temas documentados, apoyados en imágenes de archivo de los famosos personajes, y esto es  un acierto de los realizadores. Felicidades Lino por tu presencia y por tus conocimientos memoriosos y puntuales..

El documental dedicado a Ñico Saquito nos muestra no sólo la grandeza humana de este gran sonero santiaguero, sino su talento innato para la guaracha de doble sentido y la desbordante imaginación con que asume sus composiciones, su humor criollo en "María Cristina" y otras 20 composiciones de su autoría.

El célebre  Trío Matamoros es quizás la Agrupación cimera de este tipo de formato que popularizó el son cubano desde su fundación en 1925, en toda  América y el Caribe,  por sus múltiples grabaciones con la disquera Víctor y sus innumerables giras artísticas y presentaciones en vivo en numerosos países, teniendo a México como su base de proyección internacional.

Siro Rodríguez, maracas y segunda voz tenía una personal armonía y concepto rítmicos que le permitía improvisar con éxito todo lo que cantaba, apoyando a la primera voz de Miguel.

Rafael Cueto, guitarrista acompañante, tenía un tumbao natural,  melódico y armónico que lograba en los bajos de su guitarra, agregando elementos de percusión en la tapa o caja de su instrumento para contraponerse en perfecto contraste con el rayado santiaguero de Miguel en la guitarra prima.

Miguel Matamoros, primera voz, guitarra prima,  compositor y líder del Trío, utiliza de manera libre la figura rítmica y melódica de la tradición popular trovera de la escuela de Pepe Sánchez, el padre genitor del bolero son y  la Trova tradicional cubana desde Santiago de Cuba, donde destacan también y son grandes entre los grandes, Sindo Garay, Villalón y  Manuel Corona( nacido en  Sagua la Grande, Las Villas) pero santiaguero por adopción y afinidad con estos grandes fundadores de la Trova y el Son cubano.

Con Miguel Matamoros y su Trío se abre un capitulo de verdadera internacionalización del bolero, del son, la guaracha  y otros ritmos cubanos, desde antes de la primera mitad  del siglo XX, primero en México y el resto de América Latina y el  Caribe, hasta Nueva York y Europa, un poco más tarde, con otras agrupaciones y músicos como Ignacio Piñeiro, Don Aspiazu, Machito, Mario Bauzá y Antonio Machín quienes triunfaron en USA y Europa desde la década de 1940 a 1960.

Al observar la presentación de los documentales dedicados al Trío Matamoros y al rey de la Guaracha cubana, Ñico Saquito,  me doy cuenta de la enorme importancia que tiene  la producción cinematográfica: "Trova de Oro" para las nuevas generaciones de cubanos dentro y fuera de la isla y del público mexicano ,  porque  en este mundo globalizado, el mercado de la música está inundado de sonidos chatarra, donde lo principal es vender a cualquier precio y las productoras deforman el gusto por la buena música. Bien por Rubén y Cynthia;  sigan por ese camino  para promover y difundir lo mejor de la música cubana a través del bolero son y de la Trova  cubana,  que es única en el mundo, y forma  parte de nuestro patrimonio, de nuestra identidad.¡Enhorabuena !

Agradecemos, por nuestra parte, las facilidades brindadas por la Secretaría de Cultura del gobierno del estado de Yucatán en la persona de su Secretario, Sr. Renán Guillermo González, así como al Director de Artes Visuales, maestro Manuel May Tilán, para que Rubén y Cynthia presentaran su proyecto en Mérida y a nuestro Cónsul, Jesús Manuel García Rodríguez, por estar pendiente de todos los detalles. Al promotor de la trova yucateca y cubana, Roberto Mac-Swiney, al gran músico y tresero yucateco, Ricardo Vega, director del Grupo sonero Yahal  Kab ; también a nuestros compañeros de la Directiva de la Asociación José Martí, por la divulgación y asistencia, en especial al destacado cineasta  cubano avecindado en Mérida, Roberto "Luminito" Fernández, miembro activo de nuestra Asociación.

*Pedro Juan de la Portilla Cabrera intelectual cubano residente en México, Presidente de la  Asociación de Cubanos Residentes en México José Martí (Delegación Yucatán).

Fuente: Enviado por el autor a Martianos-Hermes-Cubainformación-Cubasolidaridad

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