Prensa Latina - Cubainformación.- Cuba sustituye los hidroclorofluorocarbonos (HCFCs) por alternativas tecnológicas, eficientes y económicas que no dañen la capa de ozono, ni contribuyan a aumentar el efecto invernadero.

Nelson Espinoza, director de la Oficina Técnica del Ozono (OTOZ), declaró que en ese sentido se encuentra en marcha un plan nacional de eliminación de esas sustancias entre el 2012 y el 2030.

Entre las alternativas refrigerantes naturales se encuentran hidrocarburos como el ciclopentano y el gas amoniaco.

La primera fase de este plan nacional se desarrolla entre 2012 y el 2020 y constituye un reto para el sector industrial y el productivo, señaló.

En este período se tratará de detener el consumo de HCFCs en el país para el 1 de enero del 2013; se persigue además reducirlo en un 10 por ciento para la misma fecha del 2015 y recortarlo en un 35 por ciento para el primer día del 2020.

El objetivo de erradicar esas Sustancias Agotadoras del Ozono (SAO) se corresponde con la meta del Protocolo de Montreal, tratado que cumple 25 años.

Como parte del Programa de eliminación no se pueden comprar equipos que contengan freón 22 o R22 que se emplean en máquinas de refrigeración, precisó.

Para el 2015 se eliminarán las espumas con 141b utilizado en la limpieza de sistemas de refrigeración, indicó.

Espinoza precisó que un ejemplo de buenas prácticas en la sustitución de SAO por alternativas tecnológicas amigables con el medio ambiente fue la utilizada con el Bromuro de Metilo.

Esa sustancia que tuvo amplio uso en la fumigación de almacenes y cultivos protegidos quedó reemplazada por tecnología múltiple de control de plagas y uso de injertos, señaló.

La segunda fase del Programa Nacional de eliminación de HCFC se realizará entre el 2020 y el 2030 y su mayor impacto será en los servicios.

Sus objetivos son reducir en un 67,5 por ciento el uso de esas SAO para el 1 de enero del 2025 y erradicarlas totalmente en el 2030.