El jurado informó que por la obra de toda la vida mereció la estatuilla Ada Mirta Cepeda, procedente de la provincia cubana Ciego de Ávila, por la entrega al trabajo cultural comunitario como gestora de proyectos y promotora de los procesos más auténticos.
Asimismo destacó, entre otros méritos, la dedicación de Cepeda al estudio preservación y revitalización de las expresiones y manifestaciones de la cultura popular tradicional siempre vinculada al trabajo de sensibilización sociocultural en las comunidades.
Por su parte, el proyecto artístico galardonado fue La Camorra, de la provincia Pinar del Río, por extender y desarrollar la cultura en todas sus dimensiones y por apostar en cada una de las acciones por el mejoramiento humano.
Con La Camorra, reconocen los especialistas, se benefician más de siete mil habitantes, dentro de los que se encuentran las poblaciones más vulnerables y sensibles de ese territorio.
En la categoría Agrupación-Institución fue distinguido el Conjunto Artístico Integral de Montaña, de la provincia Granma, por llevar la cultura de forma sistemática por más de 20 años a lo más intrincado del país.
La ocasión fue propicia para que Aniria Moreno, presidenta del Consejo Nacional de Casas de Cultura informara la entrega de un reconocimiento especial a la obra de toda la vida de Mongo Rives, exponente del repentismo y del ritmo pinero el sucu-sucu.
Al ofrecer más detalles, Moreno expresó que, entre otras razones, se distingue a Rives por su aporte en el plano musical dirigido al enriquecimiento de las raíces más autóctonas y por su labor sostenida con los talleres de repentismo infantil.
A propósito del Premio Nacional de Cultura Comunitaria 2012, dijo que se recibieron 49 propuestas en las diferentes categorías, de esa cifra fueron nominados 12, quienes formaron la cantera para la selección del lauro en los apartados establecidos.
También se anunció que la ceremonia de premiaciones se realizará el próximo día 29 en el teatro La Caridad de la provincia de Villa Clara.
