Rolando Silven Laffita - AIN.- La primera Biblioteca-Parque de Cuba, en La Habana, ha devenido atractiva propuesta recreativa para muchas familias en los albores de año nuevo.
Emplazada en el antiguo parqueo de la Biblioteca Nacional José Martí, el proyecto tiene como objetivo atraer a los diferentes segmentos de edades de la población al disfrute de la lectura desde una forma novedosa.
Abierta durante toda la semana, a la instalación se puede acceder por la calle Aranguren, donde dan la bienvenida una serie de propuestas artísticas como exposiciones plásticas, actividades de participación y oferta de libros.
Entre bancos y jardines, a la sombra de los árboles, cada iniciativa busca fomentar la participación ciudadana a través del arte y la literatura, e invitan a compartir el conocimiento desde dinámicas educativas.
Se trata de un ambiente al que se entra para abrirse a la cultura, comentó a la AIN María Carrazco, madre de dos pequeños que deambulaban entre los stands de libros.
No es la primera vez que oigo hablar de una biblioteca-parque, y como aquí nos explican, ya son muy habituales en España y países de Latinoamérica como Argentina y Colombia, dijo Carrazco.
Como expresara en su apertura el Doctor Eduardo Torres Cuevas, director de la Biblioteca Nacional, es una interesante manera de circular el conocimiento entre personas de todas la edades, y propiciar la interacción directa con la cultura.
