Juventud Rebelde.- Reconocen apoyo decisivo del Ejército Juvenil del Trabajo en el desarrollo de la economía cubana y la formación de los más nuevos, durante la celebración del aniversario 40 de la fundación de esa fuerza.

Un reconocimiento al Ejército Juvenil del Trabajo (EJT) por haber sido un espacio para la formación integral de miles de jóvenes cubanos durante cuatro décadas, fue entregado al general de brigada Eliécer Velázquez Almaguer, jefe de esa fuerza, por Yuniasky Crespo Baquero, primera secretaria del Comité Nacional de la UJC.

También se les entregó un diploma de reconocimiento, firmado por el Ministro de las Fuerzas Armadas Revolucionarias, por su destacada participación en diferentes tareas productivas vinculadas con la agricultura, la construcción, el comercio y la salud pública, de manos del general de cuerpo de ejército y Héroe de la República de Cuba, Joaquín Quintas Solá, viceministro de las FAR, quien les transmitió una felicitación a nombre de ese Ministerio.

El acto político y ceremonia militar con motivo del aniversario 40 del EJT se realizó este sábado con la presencia del miembro del Buró Político y Héroe de la República de Cuba, general de cuerpo de ejército Leopoldo Cintra Frías, ministro de las FAR.

Resguardado por la tradición heroica de las montañas orientales, los jóvenes combatientes del EJT colocaron una ofrenda floral en el Mausoleo del Tercer Frente, como preámbulo de la jornada de celebración y en honor al Comandante de la Revolución Juan Almeida Bosque y sus compañeros de lucha caídos durante el enfrentamiento contra la tiranía batistiana o fallecidos luego del triunfo revolucionario.

El general de brigada de la Reserva Juan Antonio Hernández Hernández resaltó la significación del momento fundacional del EJT por el General de Ejército Raúl Castro, al fusionarse, el 3 de agosto de 1973, la Columna Juvenil del Centenario con jóvenes de las Divisiones de Infantería Permanentes.

El soldado Michel Díaz Céspedes manifestó el compromiso de las tropas actuales con la batalla económica que libra el país, como garantía de continuidad histórica de la Revolución, y exigió, a nombre de sus compañeros, la liberación de los Héroes antiterroristas cubanos prisioneros del imperio.

En el acto se realizó el ascenso en grados de varios oficiales, así como la entrega de las distinciones Destacado en la Producción y la Defensa, Servicio Distinguido y del carné del Partido y de la UJC a destacados en las misiones asignadas.

La jefatura territorial de Santiago de Cuba recibió la Réplica del Pilón como mejor mando cafetalero en la última etapa de trabajo, mientras la Réplica del Porrón distinguió a la jefatura territorial de Camagüey como mejor mando en la zafra azucarera.

Jefes principales de las FAR, el MININT, el Ejército Oriental y el EJT, junto a dirigentes del Partido y el Gobierno y pobladores del Tercer Frente presenciaron este solemne momento y disfrutaron de una muestra expositiva que recoge las experiencias de los soldados de esta fuerza en la agricultura cañera y no cañera, la construcción de viviendas, el desarrollo de la infraestructura ferroviaria, el manejo de granjas y mercados agropecuarios, las campañas antivectoriales, misiones internacionalistas, entre otras tareas asignadas por la máxima dirección del país.