Los galardonados descuellan en la vida y obra de la poeta y editora Laura Ruíz, el diseñador Alfredo Montoto, los traductores María Teresa Ortega y Rodolfo Alpízar, el narrador Ian Rodríguez, el poeta Abilio Caballero y el escritor Alfredo Zaldívar.
También recibieron sellos por cinco, 10, 15 y 20 años de labor continuada en el sector un grupo de 26 dirigentes y promotores de las diversas empresas editoriales y distribuidoras del Instituto Cubano del Libro (ICL).
Jesús David Curbelo, director del Centro Cultural Dulce María Loynaz, destacó que el principal reconocimiento de un artista es sumarse a una tradición, como en este caso el de la literatura cubana para interactuar, dialogar, luchar y disentir con sus principales corrientes y manifestaciones.
Dijo que esta es una ocasión de fiesta porque la cultura cubana se organiza de forma tal que permite distinguir a quienes le aportan nuevos matices y caminos , la promueven y le imprimen mayor vitalidad, ya sea desde la creación o desde la gestión de su encomienda social.
Precisó que quienes fueron reconocidos con la Distinción por la Cultura Nacional, muchos de los cuales aún son jóvenes, poseen una obra vasta y trascendente dentro del patrimonio espiritual de la nación.
El acto contó con las actuaciones del grupo Jade, heredero de la mejor tradición musical criolla, a la que insuflan aires de modernidad y complejidades poéticas, acordes con estos tiempos.
Entre los asistentes a la ceremonia se encontraban Rafael Bernal, ministro de Cultura, y la escritora, investigadora y diputada Zuleica Romay, Presidenta del ICL.