Cuba Hoy.- Desde este lunes y hasta el próximo viernes sesiona en el Palacio de Convenciones de La Habana, bajo el lema "Enfermedades cardio-vasculares, nuestro desafío en el siglo XXI". El evento tiene como propósito exponer las investigaciones y procedimientos más novedosos para tratar los padecimientos del corazón.
Retos para el corazón
Ante el aumento de las enfermedades crónicas no transmisibles y en particular las cardiovasculares, disminuir la incidencia, prevalencia, morbilidad y mortalidad de estos padecimientos constituye un reto para la cardiología.
Lisandra Fariñas Acosta - Foto: Juvenal Balán - Granma.- En Cuba tienen una alta prevalencia la cardiopatía isquémica y las enfermedades cerebrovasculares. “La cardiopatía isquémica y las enfermedades cerebrovasculares representan la primera causa de muerte en la mayoría de las naciones de la región, y en Cuba tienen una alta prevalencia. Por tanto, el control y disminución de los factores de riesgo cardiovasculares han de representar el mayor reto de la Cardiología latinoamericana en la época actual, en lo cual han de participar también otras instituciones sociales y gubernamentales”, dijo a Granma el profesor Eduardo Rivas Estany, Presidente de la Sociedad Cubana de Cardiología y del Comité Organizador del VIII Congreso cubano sobre esta rama de la medicina.
Este evento, que sesiona desde este martes y hasta el próximo día 6, acogerá como parte de su programa dos relevantes simposios con destacada presencia internacional; Arritmias y Estimulación Cardíaca, y Cirugía Cardiovascular en niños y adultos.
Para el doctor Rivas Estany, la celebración de esta cita tendrá una influencia muy positiva en el desarrollo cardiológico cubano. “Tener la posibilidad de encontrarnos en una reunión la casi totalidad de los cardiólogos y cirujanos cardiovasculares del país para actualizar e intercambiar nuestros conocimientos y experiencias, así como conocer los resultados de las más recientes investigaciones médicas relacionadas con nuestro trabajo en el país, y en el mundo, sin duda nos proporcionará actualizados conocimientos que pondremos a disposición de nuestros pacientes. Además, poder escuchar e intercambiar con valiosos especialistas de todo el mundo nos concede el inigualable privilegio de adquirir conocimientos de una manera directa e inolvidable. Variados trabajos de colaboración internacional, o multicéntricos nacionales, probablemente han de originarse o desarrollarse en el marco de este Congreso”.
El Profesor insistió en la necesidad de la elevación del nivel educacional y socio-cultural de la población en los países de Latinoamérica si se quiere mejorar su cuadro de salud cardiovascular. “También debe impulsarse la labor investigativa en el área de las Ciencias Médicas, en particular de la Cardiología, que con el decursar de los años se convertiría en el motor impulsor del mejoramiento del cuadro de salud de la población. Congresos cardiológicos como el que celebramos en La Habana constituyen un lugar propicio para la presentación de los resultados de tales investigaciones, así como para coordinar y proyectar nuevos estudios”, concluyó.