Prensa Latina.- El trabajo de Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) en Cuba está respaldado por la solidaridad de esta nación, señaló hoy el representante regional de esa organización, Fernando Protti. En pocas oportunidades en todo el mundo se habla de los refugiados, quienes superan en la actualidad los 51 millones de personas, cinco veces la población cubana, comentó Protti durante un conversatorio en la sede de la Asociación Cubana de las Naciones Unidas.
El encuentro se realizó este viernes en ocasión de celebrar 25 años la oficina de Acnur en la isla, en coincidencia con el Día Internacional del Refugiado.
El trabajo de Acnur es humanitario, sin color político, ni raza, ni religión, subrayó Protti y recalcó que es necesario combatir las causas estructurales que provocan los desplazamientos forzosos de las personas sino seguirá el sufrimiento que representa la condición de refugiado.
Alberto de Aragón, coordinador de Acnur en Cuba señaló que hasta la fecha se han asistido aquí más de 11 mil refugiados de 35 naciones, de ellos, unos ocho mil recibieron apoyo para regresar a sus países, así como otros fueron destinados a terceros países.
Aragón subrayó entre los momentos más destacados de la labor de la oficina cubana la repatriación a Namibia de mil 473 jóvenes que estudiaban en Cuba en 1989, tras la independencia de esa nación africana.
Entre 1991 y 1994 el arribo a la zona oriental del país de cuatro mil 500 haitianos, luego del golpe militar que depuso al presidente Jean Bertrand Aristide, fue también un hecho significativo por el operativo desplegado para la protección y asistencia humanitaria, precisó.
Destacable resultan las escuelas internacionales de la Isla de la Juventud, al sur de esta capital en las que se han educado niños y jóvenes namibios, angoleños, saharauies y sudaneses, entre otros, apuntó.
A inicios de 2014 había aquí 384 personas de ocho nacionalidades registrados como refugiados, el 93 por ciento de los mismos disfrutan de becas gubernamentales, principalmente en la educación superior.
Agregó que desde 1996 y hasta la actualidad arriban a Cuba de forma espontánea y como turistas muchas personas que buscan protección internacional.
Aún cuando Cuba no es signataria de tratados sobre refugiados y ni tiene una política de integración local para esas personas más de 300 refugiados disfrutan de de protección provisional con acceso a los servicios de salud y educación antes de encontrar soluciones duraderas para su reasentamiento, indicó.
