Mesa Redonda.- De la fundación, misiones, resultados y futuro del Centro de Inmunología Molecular, en su aniversario 20, se hablará en la Mesa Redonda, en la que participarán los principales directivos de esta institución científico-productiva de vanguardia en el país y con un papel fundamental en la batalla contra el cáncer.
Sustentar la economía en el conocimiento
A 20 años de su inauguración por Fidel el 5 de diciembre de 1994, el Centro de Inmunología Molecular es hoy una entidad investigativa de primer nivel que fabrica novedosos productos para la salud de la población y genera crecientes ingresos vinculados a sus exportaciones
Orfilio Peláez - Granma.- En los años finales de la década del 80 del pasado siglo y con más sueños que recursos, un pequeño grupo de investigadores del modesto laboratorio experimental del Instituto Nacional de Oncología y Radiobiología (INOR) logró obtener a partir de ratones las primeras producciones de anticuerpos monoclonales en Cuba.
De manera muy incipiente comenzaron a emplearse en el propio hospital para tratar algunos enfermos con cáncer en etapas bien avanzadas de la enfermedad. Las evaluaciones preliminares indicaban que podrían convertirse en una promisoria herramienta terapéutica contra la agresiva dolencia.
Como recuerda el doctor Agustín Lage Dávila, el 28 de septiembre de 1989 recibieron la visita del Comandante en Jefe Fidel Castro, quien durante varias horas intercambió con los integrantes de aquel joven colectivo acerca de las potencialidades futuras de los anticuerpos monoclonales.
“Después de hacer todo tipo de preguntas, planteó la idea de que pensáramos en diseñar un proyecto para construir una instalación mucho más grande y con mayor capacidad productiva. Pasaron apenas 15 meses y el 15 de enero de 1991 comenzaron las obras civiles del nuevo local, en un terreno escogido por el propio Fidel, ubicado al oeste de la capital”.
Lo que parecía una utopía se hizo finalmente realidad cuando en medio de la etapa más crítica del periodo especial, el 5 de diciembre de 1994 quedó inaugurado el Centro de Inmunología Molecular (CIM), cuyo director fundador es el doctor Agustín Lage.
CIENCIA COMPROMETIDA
Diseñado desde el principio bajo el concepto de trabajo a ciclo completo de investigación-producción y comercialización, el CIM constituye hoy una de las instituciones emblemáticas de la industria biotecnológica nacional, dedicada principalmente a la obtención de nuevos fármacos dirigidos a tratar el cáncer y enfermedades autoinmunes, a partir del cultivo de células superiores de mamíferos, y bajo el estricto cumplimiento de las Buenas Prácticas de Producción, acorde con los estándares internacionales de calidad exigidos.
La Doctora en Ciencias Mayra Ramos Suzarte, jefa del departamento de Ensayos Clínicos, refirió a Granma que al cierre del 2013 los productos del centro llegaron a alrededor de 19 000 pacientes cubanos aquejados por tumores malignos, mientras el número de ensayos clínicos asciende en estos momentos a 80, e involucran a más de 55 hospitales de las 15 provincias, numerosos policlínicos y a unos 1 500 profesionales de la salud.
Mencionó entre ellos los aplicados con las vacunas terapéuticas Cimavax-EGF y VAXIRA contra el cáncer de pulmón avanzado de células no pequeñas, las cuales fueron aprobadas en el 2008 y el 2012, respectivamente, por el Centro para el Control Estatal de Medicamentos, Equipos y Dispositivos Médicos (CECMED).
Ello convierte a Cuba en el único país del mundo en evaluar de forma simultánea dos fármacos de tales características frente al carcinoma de ese vital órgano.
La seguridad y baja toxicidad de ambas vacunas propician que hoy sean utilizadas en el nivel de atención primaria de salud, específicamente en 68 policlínicos, donde también son sometidas a ensayos clínicos en distintas localizaciones de tumores malignos, y en combinaciones terapéuticas con otros productos del CIM, añadió la doctora Ramos.
Dijo, además, que el anticuerpo monoclonal humanizado nimotuzumab, registrado en el país para tratar neoplasias de cabeza, cuello, cerebro (en niños y adultos) y esófago, con resultados alentadores en cuanto al alargamiento de la supervivencia de los pacientes, es objeto de evaluaciones clínicas en 11 tipos de cáncer aparte de los mencionados, entre los cuales figuran el cérvico uterino, pulmón, mama, ovario y páncreas.
Tan esperanzadores medicamentos tienen la finalidad de bloquear el crecimiento y desarrollo del tumor, e incluso, reducir el tamaño de su masa, a fin de transformarlo en un padecimiento crónico controlable, compatible con una calidad de vida aceptable.
Según puntualizó la especialista, dentro de las novedades recientes de la institución destaca el registro del anticuerpo monoclonal humanizado itolizumab, de evidente acción terapéutica en la soriasis severa.
Para el joven Doctor en Ciencias Joel de León Delgado, vinculado al área de Investigaciones, uno de los objetivos inmediatos es incrementar y diversificar la carpeta de productos innovadores de alto valor agregado, premisa indispensable para hacer cada vez más económicamente sostenible la actividad científica y productiva de la entidad.
“No se trata solo de obtener medicamentos únicos, sino también de descubrir nuevas aplicaciones de los ya registrados, de modo que haya una permanente renovación de los renglones destinados al enfrentamiento del cáncer”.
Sobre los más de 20 proyectos investigativos en marcha explicó que la estrategia fundamental está centrada en mejorar la respuesta defensiva del sistema inmunológico del organismo humano ante la aparición de cualquier tumor maligno. Varios de ellos son emprendidos en estrecha colaboración con distintos centros de educación superior del país, acotó.
Es oportuno apuntar al respecto que en más de una ocasión el CIM ha sido reconocido como la unidad docente más destacada de la Universidad de La Habana.
Con un enfoque centrado en la gestión empresarial, el ingeniero Eduardo Ojito Magaz, subdirector del centro, manifestó que la entidad multiplicó por diez la producción inicial de anticuerpos monoclonales, fabrica hoy más de 50 millones de dosis de Eritropoyetina humana recombinante para el tratamiento de la anemia por insuficiencia renal crónica (cubre totalmente la demanda nacional), y las exportaciones alcanzan a 34 países, generando notables y crecientes aportes en moneda libremente convertible.
Los costos de producción han ido disminuyendo de forma considerable, gracias a la buena gestión tecnológica y la alta calificación de los especialistas y técnicos. Asimismo, el número de Doctores en Ciencias supera la cifra de 40 y la edad promedio de los investigadores es de 35 años. La plantilla total es de 1 100 trabajadores, y tenemos empresas mixtas en China, Argentina y Singapur, aseveró.
Calificó de hecho positivo el pleno funcionamiento de la nueva planta de anticuerpos monoclonales terapéuticos, pues coloca a Cuba dentro del reducido grupo de naciones que disponen de tecnología propia y suficiente capacidad instalada para plantearse un impacto visible de los citados productos en la supervivencia por cáncer a nivel de la población, unido a lo que puede aportar al potencial aumento de las ventas al exterior.
Al hablar en la inauguración del centro hace dos décadas, Fidel dijo que representaba una promesa de salud y bienestar para el pueblo, y de ingresos para nuestra economía. Veinte años después aquella profecía fue superada y el CIM devino en paradigma de los esfuerzos por transitar hacia un modelo de desarrollo sustentable, basado en el conocimiento, aplicación, y exportación de resultados de la ciencia, una institución donde el compromiso con la sociedad es práctica cotidiana.