Inicia este proyecto teatral, Premio Nacional de Cultura Comunitaria, un nuevo recorrido por las serranías guantanameras, y celebra así sus 25 años de labor artística
Jorge Luis Merencio Cautín - Granma.- La Cruzada Teatral Guantánamo-Baracoa, Premio Nacional de Cultura Comunitaria, inicia un nuevo periplo por las serranías de esta provincia, el cual contará con la más nutrida asistencia de agrupaciones foráneas, en los 25 años de vida de esta propuesta del arte.
Emilio Vizcaíno Ávila, director del proyecto, informó a Granma que hasta ayer martes habían confirmado su asistencia las compañías AGITE teatro y Luz de Luna (Colombia), Pipuppets (México), Parlendas (Brasil), junto a Yheppa títeres y Etcétera (España).
Agregó que también ratificaron su participación la antropóloga estadounidense Laura Allen Frederiks y cinco agrupaciones de pequeño formato, pertenecientes a la organización de teatro joven de Dinamarca.
Dichas compañías se sumarán a los grupos locales Guiñol Guantánamo, La Barca, Ríos y Campanario, y a representaciones de las provincias de La Habana, Camagüey y Granma para llevar durante más de un mes lo mejor de su arte a intrincados parajes de los municipios guantanameros de Manuel Tames, Yateras, San Antonio del Sur, Maisí, Imías y Baracoa.
Además de las funciones teatrales los montañeses podrán disfrutar de talleres, conferencias, materiales audiovisuales, resultados de investigaciones, exposiciones y paneles de crítica.
Una de las actividades más importantes de este evento, con el cual se rinde homenaje a José Martí en su natalicio, lo constituye el coloquio Teatro y Comunidad, previsto para el 25 de febrero en Boca de Yumurí, sitio que divide a los municipios de Baracoa y Maisí.
Cruzada teatral, una obra de amor en las montañas
Yaymara Villaverde Marcé - AIN.- El retablo, el tradicional teatrillo de cartón de los juglares ancestrales, el escenario que en manos diestras da vida a muñecos y deviene maravilla para niños y adultos, se realza y dimensiona en la Cruzada Teatral Guantánamo-Baracoa, el mayor suceso comunitario de ese arte en Cuba.
Educar, hacer reír y soñar con historias fascinantes, y contribuir a enriquecer valores éticos y estéticos, son virtudes que consolidan a este periplo, que celebra un cuarto de siglo de llevar la magia de las tablas a los habitantes de las serranías más orientales de la Isla.
Cada 28 de enero, en homenaje al Héroe Nacional José Martí, la iniciativa aúna a actores de los grupos locales Guiñol, Dramático, La Barca y Ríos, quienes emprenden una abrupta travesía de 400 kilómetros, con la mochila al hombro y la promesa de la escenografía campestre y la sana risa de los montunos.
El itinerario comprende actuaciones en unas 200 localidades de los municipios de Manuel Tames, Yateras, San Antonio del Sur, Imías, Maisí y Baracoa, e incluye conferencias y talleres, muchos de estos sobre confección y manejo de títeres, los cuales han servido de escuela a conjuntos aficionados de esos parajes.
Se suman habitualmente al recorrido agrupaciones de otras regiones del país y extranjeras, interesadas en formar parte de esta experiencia inspirada en el Apóstol cubano, quien amó todas las artes, instó a la utilidad de la virtud y enarboló siempre su precepto humanista “Con todos, y para el bien de todos”.
Al inicio eran sólo 15 jóvenes teatristas los que se aventuraban por el lomerío guantanamero, y hoy ya sobrepasan los 50 colaboradores asiduos, y decenas de invitados.
El difícil pernoctar de 33 días en condiciones de campaña se hace más ameno con la cordialidad del campesino, la calurosa bienvenida en cada parada, y el gratificante “¡ooohhh!” del público en las funciones, por la admiración teatral, que es siempre incentivo.
Ahora, con el mismo entusiasmo del primer día, la tropa juglaresca se alista para su inminente edición 25, que tendrá amplia asistencia de artistas nacionales y foráneos.
Confirmaron ya su participación agrupaciones de España, Brasil, México, Colombia, la antropóloga estadounidense Laurie Aleen Frederik Meer y una delegación de la Asociación Internacional de Teatro para Niños y Jóvenes (ASSITEJ), en su mayoría procedentes de Dinamarca.
Se incorporarán nuevamente jóvenes Instructores de Arte de las zonas visitadas, las compañías Teatro Andante, de Granma; Teatro D´ Luz, de Camagüey, y el Guiñol Nacional con su director Armando Morales, una cátedra en esta manifestación.
El programa académico que se promoverá en el trayecto destacará por su amplitud y los teóricos que intervendrán: Dania del Pino, especialista del Consejo Nacional de las Artes Escénicas, Maité Hernández-Lorenzo, de Casa de Las Américas, y Omar Valiño, crítico y director de la editorial Tablas-Alarcos.
Como novedad, durante el Coloquio Teatro y Comunidad –clímax de los intercambios- el 25 de febrero en la localidad de Yumurí, en Baracoa, 11 discípulos de la carrera Estudios Socioculturales, de la Universidad de Guantánamo, presentarán sus tesis de grado acerca del impacto comunitario de la Cruzada.
Este capítulo celebrará los 45 años del Guiñol Guantánamo, y homenajeará a fundadores y rectores del periplo, entre ellos Carlos Leyva, su creador; Emilio Vizcaíno, su actual director, y los actores Dolores Olivares, Liuba Duporté, Rafael Rodríguez, Félix Salas, Gertrudis Campos, Maribel López y Ury Rodríguez.
Se halagará, además, a Armando Morales, Omar Valiño y Maité Hernández-Lorenzo, voceros y defensores de la Cruzada en todos estos años.
En intercambio con la AIN, algunos de los artistas señalaron la trascendencia de este suceso cultural, al que calificaron entre los más humanos que se realizan en el país, por llegar, alegrar y cultivar a quienes por cuestiones de lejanía no concurren usualmente a las grandes salas de teatro de las urbes.
“Hay toda una generación de esas lomas –dijeron- que nació y creció conociendo clásicos de la literatura cubana y mundial a través de las representaciones teatrales de este evento, que nunca debe desaparecer. Este es nuestro compromiso eterno con el público serrano”.