Iris de Armas Padrino - La Habana, 9 mar (AIN) La Medicina Natural y Tradicional (MNT) en Cuba ya cuenta con 78 productos en el cuadro básico de medicamentos del Ministerio de Salud Pública, los cuales se aplican en la Atención Primaria de Salud, aseveró en esta capital un experto.
Los logros del país en este campo serán mostrados en la V Convención de la Sociedad Cubana de Medicina Bioenergética y Naturalista, Bionat 2015, que se efectuará desde mañana y hasta el viernes, dijo a la AIN el Doctor en Ciencias Humberto López Pellón, presidente de su Comité Organizador.
Más de 200 especialistas nacionales y de Japón, Colombia, México, España, Perú y Estados Unidos asistirán al encuentro, con sede en el Palacio de Convenciones de La Habana, subrayó el también Profesor Consultante del hospital Carlos J. Finlay.
Recordó que el desarrollo de la MNT está recogido en el Lineamiento 158 de la Política Económica y Social del Partido y la Revolución, el cual refiere prestar la máxima atención a esta tarea.
López Pellón mencionó entre los renglones con mayor demanda de la población a los jarabes de aloe, de imefasma, de orégano, los propóleos y sus tinturas, y el pino macho, este último de gran efectividad para los hongos de los pies.
Aclaró que en Cuba el 45 por ciento de la población está afectada con enfermedades respiratorias, por lo cual los jarabes antes mencionados resultan muy beneficiosos.
Utilizada desde hace siglos en el mundo, la Medicina Natural y Tradicional, validada científicamente por investigaciones integradas al Sistema Nacional de Salud, se emplea en la mayor de las Antillas en la prevención, diagnóstico, tratamiento y rehabilitación de enfermedades.
Además, destaca su impacto en los estilos de vida contra las dolencias crónicas no transmisibles
Expertos en el tema actualmente trabajan en cómo influir en la hipertensión arterial, las adicciones y las dolencias respiratorias.
Aunque en la nación antillana la MNT se usaba por los aborígenes, desde 1996 está aprobada su aplicación en la fitoterapia, apiterapia, acupuntura, el empleo de aguas y fangos mineromedicinales, la homeopatía, terapia floral y el ozono, entre otras.