Un homenaje a Maceo y Che rindieron los asistentes al XI Pleno del Comité Nacional de la UJC, que contó con la presencia de José Ramón Machado Ventura, segundo secretario del Comité Central de Partido. Los participantes evaluaron el cumplimiento de los acuerdos del IX Congreso celebrado en abril de 2010, así como también conocieron de los principales resultados de la discusión del documento base de la cita de julio próximo.
Yuniel Labacena Romero - Juventud Rebelde - Video: TV Cubana / CubaHoy.- Porque como aseguró el General de Ejército Raúl Castro, Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, en la clausura del IX Congreso de la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC), los documentos de esa cita no debían convertirse en letra muerta ni engavetarse a modo de memorias, los miembros del XI Pleno del Comité Nacional de la organización evaluaron este domingo las acciones realizadas para cumplir los acuerdos de abril de 2010.
En la reunión del máximo órgano de dirección de la UJC entre congresos, que presidió José Ramón Machado Ventura, segundo secretario del Comité Central de Partido, se coincidió que todo lo acordado en el cónclave fue implementado y trabajado durante estos cinco años, a pesar de que muchos asuntos no están resueltos totalmente, por lo que se han tenido en cuenta en las propuestas que discutirá el X Congreso.
Varios participantes en el Pleno y hasta los miembros del Buró Nacional de la UJC insistieron en algunos temas en los que se debe seguir trabajando. Entre ellos destacan el seguimiento a las preocupaciones de los jóvenes, la promoción de actividades relacionadas con la enseñanza de la historia de Cuba y recreativas para el uso del tiempo libre, así como la formación vocacional, continuidad de estudios y ubicación laboral.
Igualmente destacaron el tratamiento de las carreras priorizadas en el nuevo contexto que vive el país de actualización económica, la utilización de las nuevas tecnologías y de las redes sociales, sobre todo para la formación integral y el combate ideológico, la atención a los jóvenes que se vinculan a las nuevas formas de gestión estatal y las acciones vinculadas a la defensa de la Patria.
Al abordar elementos relacionados con la vida interna, las estructuras y el quehacer de la UJC, varios miembros del Pleno como Lisandra Montero, primera secretaria de la organización en el municipio capitalino Plaza de la Revolución y Nayla Leyva, con igual responsabilidad pero en la provincia de Holguín, insistieron en multiplicar las acciones logradas e involucrar más en ella a los jóvenes en la base, sean militantes o no.
En tal sentido se advirtió que quedan acciones pendientes en la preparación e integralidad de los cuadros, militantes y jóvenes, la atención al universo juvenil como vía para incrementar la militancia de la organización en el ingreso al Partido, así como también la necesidad de reforzar el trabajo con el secretario general del comité de base, que constituye el eslabón fundamental en el trabajo de la UJC.
No obstante Yuniasky Crespo Baquero, primera secretaria del Comité Nacional de la UJC, expresó que vamos camino a lograr esa organización más dinámica, inclusiva y transformadora que necesitan estos tiempos y quieren los jóvenes. «Muchos acuerdos se implementaron y cumplieron prontamente, otros fueron rebasados en contenido y profundidad por los acuerdos del VI Congreso del Partido y su Primera Conferencia Nacional y hubo que modificarlos o adecuarlos, y otros como tendencia tendrán que sostenerse en el tiempo por su impacto y alcance y deberán ser debatidos también en la cita de julio próximo».
En ello también coincidió Machado Ventura, quien insistió en la necesidad de buscar autonomía en muchos aspectos del trabajo de la UJC, pues «no se puede hacer todo igual en los mismos sitios del país y en todo momento». Además agregó que hay que ser sistemáticos en la labor de la organización, no se pueden olvidar las tareas y aunque muchas estén cumplidas, hay que volver a ellas para saber cómo está lo que se hizo.
El también Vicepresidente de los Consejos de Estados y de Ministros reiteró el papel que debe desempeñar el secretario del comité de base de la vanguardia política juvenil en los consejos de dirección de su centro de trabajo o estudio, donde debe no solo trasladar las opiniones de sus jóvenes sino también exigir el cumplimiento de sus inquietudes y sugerencias.
No se trata de buscar contradicciones ni de ser hipercríticos, pero esa es la labor de las organizaciones de base y de ese secretario general. No podemos pensar que todo el mundo tiene que hacerla igual, ni la misma combatividad, facilidad para exponer, para expresarse... para vamos a buscar el secretario que sea más idóneo, el que realmente nos pueda representar de esa forma, aseguró.
Entre las transformaciones de la UJC en los últimos cinco años se destacan la simplificación de los procedimientos para las reuniones, crecimientos, estímulos y traslados, la reducción de la escala de cotización que beneficia al 96 por ciento de la militancia; así como el trabajo conjunto con las organizaciones estudiantiles y los movimientos juveniles.
Durante el IX Pleno —el último antes del X Congreso de la UJC y que rindió un homenaje a Maceo y Che, en el aniversario 170 y 80 de sus natalicios, respectivamente, este 14 de junio— también se brindó una información detallada sobre la discusión del documento base Las razones para luchar y vencer se multiplican cada día, desarrollada en todos los comité de base y que involucró a jóvenes, militantes o no, así como también a las organizaciones estudiantiles y movimientos juveniles.
En tal sentido se conoció que el proceso llegó a un total de 30 016 estructuras y que los debates sostenidos se caracterizaron por un ambiente de intercambio franco, abierto y crítico; aunque no existió un buen acompañamiento de los jóvenes no militantes (solo cerca de 55 000), algo que no sucedió con el nivel de participación obtenido en los debates anteriores de la UJC camino a su X Congreso.
Según Yoan Palmero, miembro del Buró Nacional de la UJC, quien presentó el informe, los más de 8 500 planteamientos procesados se resumieron en un total de 546 propuestas, modificaciones y sugerencias o recomendaciones, y los temas que más se analizaron y generaron la mayor cantidad de propuestas están relacionados con el lograr una organización más dinámica, inclusiva y transformadora y el consumo cultural y la recreación.
Como colofón del encuentro José Ramón Balaguer Cabrera, miembro del Comité Central del Partido y jefe de su Departamento de Relaciones Internacionales recibió la credencial de Invitado de Honor al X Congreso. Su entrega la hizo la Primera Secretaria de la UJC, quien a nombre de los jóvenes reconoció así a ese hombre que fue protagonista de la primera marcha de las antorchas.
También en el Pleno se reconoció el trabajo de 84 miembros del Comité Nacional, quienes terminaron este domingo sus funciones. En consonancia Machado Ventura encomió su labor, su firmeza y la entrega, de la cual fueron protagonistas en estos cinco años de transformaciones, que han de mantener en sus nuevas responsabilidades.
Para que los debates lleguen a todo el universo juvenil
José Ramón Machado Ventura, segundo secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba, presidió XI Pleno del Comité Nacional de la Unión de Jóvenes Comunistas
Amaya Saborit Alfonso - Granma.- Próximo a la realización del X Congreso de la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC) a celebrarse el mes de julio venidero, aconteció ayer, en el Centro de Convenciones Lázaro Peña, el XI pleno del Comité Nacional de esta organización.
Espacio para explicitar el estado de cumplimiento de los acuerdos adoptados en el IX Congreso devino la cita, en la que se apreció que si bien la organización ha evolucionado y transformado, aún existe la insatisfacción de que a veces los grandes eventos han alcanzado mayor impacto entre la juventud que las propias metas trazadas cotidianamente. Además, sobresalieron diversas opiniones sobre la preparación de los cuadros de la organización.
Sobre estos aspectos, José Ramón Machado Ventura, segundo secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y vicepresidente de los Consejos de Estado y de Ministros, expresó que hoy se debe acabar con los cuadros esquemáticos y formar dirigentes que piensen con su propia cabeza y en beneficio de quienes representan.
Explicó que si bien a estos han de darles orientaciones, también deben tener autonomía para que puedan alcanzar las soluciones propicias a los problemas.
En otro momento de los debates, Machado Ventura abordó la necesidad de que los comités de base discutan sus dificultades desde su propio espacio para de ahí poder influir y participar en sus soluciones, y calificó de fundamental el papel del secretario general.
En torno a los acuerdos que aún permanecen del congreso anterior y sobre los que ha de insistirse, Susely Morfa González, segunda secretaria de la UJC, subrayó la preparación e integralidad de los cuadros, militantes y jóvenes, el seguimiento a sus preocupaciones; la atención al universo juvenil como vía para incrementar la militancia; el ingreso al PCC; la promoción de actividades relacionadas con la enseñanza de la Historia de Cuba; formación vocacional, así como la continuidad de estudios y la ubicación laboral.
Sobresalió también el tratamiento a las carreras priorizadas, la atención al sector no estatal, captación y selección de jóvenes para el Servicio Militar Voluntario Femenino, atención a la Vanguardia Combativa Ramón López Peña; trabajo conjunto con el BON UJC-Minint; y la utilización de las nuevas tecnologías y las redes sociales para el combate ideológico, así como la promoción de actividades recreativas para el uso del tiempo libre.
Nayla Leyva Rodríguez, primera secretaria de la UJC en Holguín, comentó, como parte del intercambio, que se deben cohesionar esfuerzos respecto a la preparación de los cuadros. En busca de uno mucho más preparado, con mayor cantidad de herramientas en la labor política e ideológica, teniéndose en cuenta el contexto que estamos viviendo y con capacidad para convocar, comprometer y convencer a las masas.
Yurislenia Pardo, en representación del periódico Adelante, se refirió a la necesidad de que la UJC desde el X Congreso y de conjunto con las organizaciones de masas y sociales, concrete acciones que lleguen a las comunidades menos beneficiadas, con mayor cantidad de jóvenes desvinculados del estudio o trabajo y con mayores índices de insalubridad o violencia.
Mientras que Indira Fajardo, presidenta nacional de la Brigada de Instructores de Arte José Martí, abogó porque esta evaluación de acuerdos esté sustentada no solo en “el impacto de nuestro trabajo como organización, si no que sea reflejo de lo que el resto de los jóvenes perciben”.
En la sesión de trabajo, se dio lectura a una información resumen de la discusión del documento base Las razones para luchar y vencer se multiplican cada día, boceto de lo que sería el Informe Central al foro, y que se concibió con el objetivo de “brindar a nuestra membresía y a los jóvenes en general la posibilidad de participar directamente en el proceso de construcción de los temas, contenidos y propuestas que serán abordados en el congreso”, dijo Joan Palmero Pérez, miembro del Buró Nacional de la UJC.
Yuniasky Crespo Baquero, primera secretaria de la UJC, entregó la credencial de Invitado de Honor al X Congreso a José Ramón Balaguer Cabrera, miembro del Secretariado del Comité Central; y el pleno devino, además, momento en el que se despidió a 84 miembros del órgano directivo de la UJC, calificados por Machado como partícipes eternos en los devenires de la organización.
La UJC y un debate profundamente maceísta y guevariano
Maria Elena Alvarez Ponce - La Habana, 14 jun (AIN) De esencias y honda raíz maceísta y guevariana, resultó el debate del Comité Nacional de la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC) en su XI Pleno, celebrado hoy con la presencia de José Ramón Machado Ventura, segundo secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y vicepresidente de los Consejos de Estado y de Ministros.
A Antonio Maceo y Ernesto Che Guevara honraron en su fecha natal los miembros del máximo órgano de dirección de la UJC entre congresos, con una sesión de trabajo a la altura del pensamiento y la acción de esos dos colosos de la historia, y que tuvo por sede el Centro de Convenciones Lázaro Peña, de la CTC.
Fue esta su última reunión ordinaria antes del X Congreso de la juventud cubana y su vanguardia política -convocado para los días del 17 al 19 de julio venidero-, y el Comité Nacional evaluó concienzudamente el cumplimiento de los acuerdos que de la novena de esas citas, cinco años atrás, recibió como mandato.
Algunos se implementaron y cumplieron prontamente, otros fueron rebasados en contenido y profundidad por los acuerdos del VI Congreso del Partido y su Primera Conferencia Nacional y hubo que modificarlos o adecuarlos, y están, también, los de carácter permanente, obra del quehacer de cada día.
Pero, en cualquier caso, cuantos hablaron, insistieron en que a esos y todos los acuerdos hay que darles seguimiento, chequearlos sistemáticamente, a todos los niveles, y deben ser divulgados y conocidos, pues -como evidenció el proceso orgánico del Congreso- muchos comités de base ni sabían de su existencia, y qué decir de los jóvenes no militantes.
Cualquier evaluación tiene que tomar en cuenta la percepción de los jóvenes, cómo reciben cada esfuerzo, acción y cambio en los métodos, vida y quehacer de la UJC, señalaron varios oradores, para quienes no pocas veces los grandes eventos se “tragan” todo lo demás, esas pequeñas cosas que se hacen y logran a diario.
Se habló, también, de la necesidad de convertir en práctica cotidiana las mejores experiencias de la preparación de la cita de julio próximo, en cuanto a la “conexión” y el diálogo con los jóvenes, la atención a sus preocupaciones y ese abrirle cauce y multiplicar los espacios para el debate y las oportunidades para una participación real y efectiva en la toma de decisiones.
Varios hicieron énfasis en que nada de lo logrado puede perderse y este afán renovador y de perfeccionamiento de la vida, estructuras y quehacer de la UJC ha de trascender la cita de julio, para construir una vanguardia más fuerte, dinámica y cercana a los jóvenes, en la cual puedan verse representados y que pueda cada vez más contribuir a su formación.
También se dijo que en estos meses camino al Congreso, la UJC ha llegado a lugares donde no tiene estructuras creadas, pero sí un universo juvenil del cual no puede desentenderse, comunidades en desventaja social y económica, que agradecen un concierto o un festival deportivo, pero precisan, sobre todo, acciones concretas y un vínculo y atención permanentes.
Machado Ventura intervino en varios momentos de la sesión para coincidir con los planteamientos y reflexiones, ahondar en algún tema e insistir en prioridades, como la necesidad de una adecuada selección y preparación de los cuadros, ante todo los secretarios generales de las organizaciones de base.
Urge ser sistemáticos, no engavetar acuerdos ni abandonar y dejar amontonar las tareas, trabajar, trabajar, y periódicamente revisar lo hecho: eso está en el abecé de los cuadros a cualquier nivel, enfatizó el Segundo Secretario del Comité Central del Partido.
Asimismo, consideró imprescindible que cada estructura funcione y haga lo que le toca, pues basta ojear el inventario de problemas tramitados para “arriba”, para darse cuenta de que una gran parte tienen su solución ahí donde fueron planteados.
El XI Pleno devino ocasión para despedir a 84 miembros del órgano de dirección de la UJC que no están en la candidatura para el Comité Nacional que ha de elegir el Congreso, y de esos jóvenes, Machado Ventura destacó su experiencia, trayectoria, vitalidad, firmeza y cualidades.
Han sido partícipes de estos años de transformaciones, a las cuales han contribuido. No es que ya pasaron, con ustedes hay que contar, y la Revolución de seguro lo hará, afirmó.
Presente en la reunión, José Ramón Balaguer Cabrera, miembro del Secretariado del Comité Central del PCC, recibió de Yuniasky Crespo Baquero, primera secretaria de la UJC, la credencial de Invitado de Honor al Congreso, especialmente dedicado a la generación “pionera” de la Revolución y a su líder histórico, Fidel Castro.
«Locos» en África Occidental
Integrantes de las brigadas médicas que combatieron el ébola sostuvieron un encuentro con los asistentes al XI Pleno del Comité Nacional de la UJC, que concluye este domingo, con un homenaje a Maceo y Che
Yuniel Labacena Romero - Juventud Rebelde.- Cuentan que muchos, incluyendo sus familias, los tildaron de «locos» al conocer que viajarían a África Occidental para cuidar la salud de otros seres humanos, con riesgo de su propia vida. Las informaciones que veían o leían del virus del ébola, que en varias regiones de ese continente causaba la muerte a miles, ponía a todos en tensión.
Sin embargo, meses después de su regreso a casa todos están convencidos de que valió la pena el riesgo, resistir las altas temperaturas, los pesados equipos de protección, la añoranza de la familia y, sobre todo, sienten la inmensa felicidad de recordar cómo muchos enfermos lograban vencer la epidemia y regresar a sus hogares sanos y salvos gracias a sus cuidados.
Son esas las experiencias que compartieron un grupo de profesionales cubanos que integraron las brigadas médicas que en Sierra Leona, Guinea Conakry y Liberia enfrentaron lo que fue considerado por la Organización Mundial de la Salud como la mayor emergencia médica mundial en los últimos tiempos, con los asistentes al XI Pleno del Comité Nacional de la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC).
En la reunión del máximo órgano de dirección de la UJC entre congresos —que sesiona en el Centro de Convenciones Lázaro Peña y constituye un homenaje a otros dos grandes héroes de todos y para todos los tiempos: Maceo y Che— este domingo se realizará una evaluación del cumplimiento de los acuerdos del IX Congreso y de la labor de la organización en estos últimos cinco años, así como también un repaso de todo el proceso orgánico camino al X Congreso de la organización, incluida la reciente discusión del documento Las razones para luchar y vencer se multiplican cada día.
Como antesala del debate hoy, los profesionales de la Salud, contaron además que a su llegada al África Occidental demostraron que podía ofrecerse un trato cercano y humano, que en oportunidades les era negado a los pacientes, quienes eran recluidos prácticamente sin asistencia alguna. Los cubanos no solo brindaron atención médica de calidad, sino también el apoyo, cariño y amor, que tanto agradece una persona cuando está enferma.
Lo más sorprendente es que no asumen poses cuando cuentan esas historias, porque saben que han hecho el bien, pues rescatar una vida es como crearla, como narró el licenciado en Enfermería Alex Castañeda Castillo, quien aseguró que durante meses siguieron la intensa rutina del combate y los protocolos de protección, todavía vigentes.
Muchos eran jóvenes que aceptaban acudir a una misión sumamente riesgosa. Así con solo 25 años de edad, el también licenciado en Enfermería Víctor Lázaro Guerra Vierra, trabajador del Hospital Pediátrico Pepe Portilla, de Pinar del Río, decidió cumplir esa misión, mientras en el mundo otros flaqueaban frente al virus, como lamentaba la Organización de Naciones Unidas.
Lázaro Víctor se estremece cuando narra las anécdotas de esos pequeños que logró salvar de la muerte mientras sus padres morían. «Tuve que canalizar por vez primera la vena de un bebé de siete días de nacido. Es difícil ver morir todos los días a niños. Pero no había otra opción que ser fuerte ante cada momento y poner mucho empeño, como clave del éxito», dijo.
También contaron sus historias el primer teniente Rotceh Ríos Molina, especialista en Medicina Interna y trabajador del Hospital Militar Central Doctor Luis Díaz Soto, de La Habana, quien el martes último fue seleccionado como el último delegado directo al X Congreso de la UJC; y el mayor Félix Báez Sarría, el galeno que contrajo la epidemia y que tras restablecerse regresó a Sierra Leona para continuar junto a sus compañeros el combate contra la enfermedad.
A propagar el paradigma y la grandeza de estos hombres invitó Yuniasky Crespo Baquero, primera secretaria del Comité Nacional de la UJC, quien añadió que ellos son ejemplo de la profunda vocación internacionalista y del altruismo que ha fomentado la Revolución. «Ejemplos como los de ustedes invitan a hacer las cosas con dignidad, optimismo y por convicción», dijo.
Lágrimas, risas, abrazos… acompañaron el diálogo con esos héroes de nuestro tiempo, como los llamó Fidel, quienes se despidieron de los jóvenes convencidos que personas como ellos, comunes y corrientes, educados bajo los principios del humanismo y el internacionalismo, estarían dispuestos a hacer lo mismo que les tocó y hasta cumplir misiones más difíciles.
