El primer vicepresidente de los Consejos de Estado y de Ministros y miembro del Buró Político del Partido, inauguró este sábado la residencia número cuatro del complejo de alojamiento de la Escuela Superior de Formación de Atletas de Alto Rendimiento Cerro Pelado. Foto: L. Anaya, José
Granma.- Miguel Díaz-Canel, primer vicepresidente de los Consejos de Estado y de Ministros y miembro del Buró Político del Partido, inauguró este sábado la residencia número cuatro del complejo de alojamiento de la Escuela Superior de Formación de Atletas de Alto Rendimiento Cerro Pelado, dijo la página digital de Jit.
El alto dirigente cortó la cinta para dejar abierto el inmueble que mejora las condiciones de descanso de 36 atletas en preparación para Río de Janeiro´16, de deportes como judo y lucha, además de seis discapacitados.
Díaz-Canel, tras participar en ceremonia con motivo de la entrega recorrió los cuatro pisos del edificio, para apreciar y departir con deportistas beneficiados con excelentes comodidades, quienes también contarán allí con un espacio de atención médica.
Antes entregó el carnet de la UJC a la joven tenista de mesa Idalis Lovet, observó las demostraciones artísticas de ejecutadas por alumnas de gimnasia y escuchó las palabras de la luchadora Katerine Videaux, campeona panamericana de Toronto´15 y quinta del Campeonato Mundial.
«Este es un compromiso mayor para seguir por más triunfos para Cuba en eterno agradecimiento a Fidel y Raúl», expresó Videaux al hablar en nombre de todos sus compañeros.
La obra concluida por la Brigada 4 de la ECOA 53 recibió una remodelación valorada en 200 000 pesos cubanos y unos 25 000 CUC, según informaron a JIT los inversionistas.
Tras el periplo por la residencia acompañado por titular del INDER, Antonio Becali, se dirigió a la cercana Escuela Nacional de Gimnasia donde departió con deportistas y entrenadores de los colectivos de cada sexo.
Un momento significativo de la visita fue la conversación con Manrique Larduet, laureado en el reciente Campeonato Mundial de ese deporte, quien con ello retornó a Cuba al medallero en una modalidad hasta ese momento dominada por representantes de países del primer mundo.
Antes de despedirse Díaz-Canel apreció y aplaudió una excelente ejecución de Larduet en la barra fija.
