Así lo afirmó Adam Wilkes, presidente en Asia de la compañía de entretenimiento AEG Live, quienes organizaron el cé­lebre concierto de los Rolling Stones en Cuba

Michel Hernández - Foto: Yander Zamora- Granma.- Cuando Adam Wilkes nació en Woodstock había pasado más de una década de la celebración del mí­tico festival de la era hippie que colocó en el mapa a ese pueblo estadounidense. Sin embargo, Adam siempre tuvo presente el simbolismo cultural de sus orígenes, que lo ha acompañado en sus experiencias creativas como presidente en Asia de la compañía de entretenimiento AEG Live, la empresa que organizó el cé­lebre concierto de los Rolling Stones en Cuba.


Wilkes fue el representante de AEG Live que estuvo detrás del concierto de sus Majestades Sa­tánicas en la Isla, un hito que Wil­kes llega a comparar con el espíritu de Woodstock’69. “Hay mu­chos grandes conciertos, pero entre esa larga lista hay algunos que se transforman por su simbolismo en eventos históricos, como sucedió primero con Woodstock’69 y casi 50 años después con el concierto de los Ro­lling Stones en Cuba”.

Adam estuvo en La Habana des­de enero para preparar junto a las autoridades cubanas el histórico con­cierto que  podrá ser visto el próximo 23 de septiembre en los cines del mundo. La banda cederá sus derechos para su exhibición en la Isla, según el Instituto Cubano de la Mú­sica (ICM). “Vi­ni­mos en diciembre por primera vez para una reunión muy rápida con el ICM. Fue una reunión muy positiva y nos dio la sensación de que todos juntos íbamos a lograr que el concierto se diera.

Perso­nalmente regresé en ene­ro durante una semana y junto con mi equipo nos quedamos hasta que se acabó el show. El equipo creció hasta 100 personas. Y al final eran 350 personas que viajaron para preparar el concierto. Tuvimos un apo­yo tremendo del gobierno cubano, del ICM y de otras organizaciones que participaron en el evento. Este fue el concierto más grande en el mundo en los últimos diez años. Aun­que fue muy importante para Cuba siento que fue un evento global”.

—¿Cómo AEG Live vio la respuesta del público cubano y la posibilidad de trabajar en Cuba?

—AEG Live es una de las compañías de entretenimiento mayores del mundo. La casa matriz está en Los Ángeles pero tenemos oficinas en todas las regiones. Te­ne­mos expe­riencia trabajando en dis­tin­tos países y en muchas situaciones distintas. Específicamente yo ma­ne­jo la oficina de Asia y estoy radicado en Shanghái. Cuando co­menzamos a preparar el concierto en Cuba existían muchos detalles que desconocíamos de ambas partes,  porque nunca se había dado un concierto de esta magnitud en la Isla. Y lo teníamos que hacer en un tiempo muy apretado. Normal­men­­te ese ti­po de espectáculo lo organizamos con 12 o 18 meses de planificación pero es­te proyecto se realizó en me­nos de tres meses.

—¿Qué expectativas tenían an­tes del concierto?

—Antes del concierto no sabíamos qué iba a pasar. Personalmente cada vez que entendía un poco más sobre la cultura cubana me emocionaba más la idea del concierto. Por supuesto esto se lo transmití a la ban­da, pero hasta que no estuvieron aquí no pudieron comprender de qué se trataba todo. La banda viaja con un grupo de personas que la han acompañado durante mu­chos años. Hay gente que han estado 30 años o más con ellos. En­tonces tienen mu­cha experiencia pre­parando conciertos de los Ro­lling y para la banda y su familia y sus managers el concierto fue uno de los mejores del mundo.

—¿Cómo percibiste las potencialidades de Cuba para acoger este tipo de megaconciertos?

—Somos muy afortunados de que ese concierto se haya realizado en este momento de la historia porque las cosas están cambiando a partir del restablecimiento de las relaciones diplomáticas entre Cu­ba y Estados Unidos. Al realizarlo establecimos un  punto de partida y es difícil saber por dónde va este camino, pero está claro que hay un im­portante trabajo por delante. Los Rolling Stones son un grupo que guía a otros artistas y es­tamos seguros que vendrán otras grandes bandas.

—¿Por qué eligieron el escenario de la Ciudad Deportiva?

—Pensamos en un par de sitios para el concierto. Había que buscar uno que cumpliera con los requerimientos específicos, se ajustara al tiempo limitado que teníamos y pudiera albergar a una gran cantidad de gente. Nos pareció que la Ciudad Deportiva era perfecta. Ha­blando de escenarios para próximos shows creo que La Habana  tiene locaciones maravillosas.

Pero si hablamos de conciertos similares al de los Rolling la Ciudad Deportiva es  excelente.

—AEG Live trabaja con artistas como Paul McCartney, Ringo Star, Coldplay, Marc Anthony, Ma­roon 5, ¿tienen planes para organizar conciertos de estos grandes músicos en Cuba?

—Trabajamos con muchos ar­tistas realmente. Me emociona mu­cho hablar con ellos sobre las oportunidades que vimos en Cuba y buscar mecanismos para que puedan ve­nir. He tenido varios sueños que espero que se puedan hacer realidad.

Pero también Cuba tiene un talento propio de nivel mundial que una gran parte del mundo no conoce. Hay una gran oportunidad para que los artistas cubanos se presenten en otras partes del mundo como América del Norte y Europa. La comunidad global de la música está fascinada con Cuba, un país que puede ser perfectamente sede de esos grandes festivales que se dan en Europa y Estados Unidos y que atraen a personas de todo el planeta.

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