Yudy Castro Morales - Foto: Jose M. Correa - Granma.- Las filiales BDC Tec y BDC Log, de la empresa belga BDC Internacional S.A., con más de 30 años de presencia en Cuba, forman parte de los 19 usuarios establecidos en la Zona Especial de Desarrollo Mariel
A Jaime Croonenberghs se le podrían escapar, quizá, muy pocos detalles de la industria cubana, de su funcionamiento y, sobre todo, de sus necesidades. Como presidente de la empresa belga BDC Internacional S.A, con más de 30 años de presencia en Cuba, ha conocido bien de cerca el mercado, al menos lo suficiente como para apoyar el alumbramiento de dos de los 19 usuarios presentes hoy en la Zona Especial de Desarrollo Mariel (ZEDM).
Registrada ante la Cámara de Comercio y con oficinas en La Habana, Cienfuegos y Holguín, BDC Internacional S.A. tiene entre sus propósitos la comercialización de equipos y maquinarias demandadas, fundamentalmente, por las industrias alimentaria, minera, farmacéutica y biotecnológica, así como por las termoenergética, pesquera, petroquímica y textil.
Precisamente, la imposibilidad de ofrecer servicios de montaje y mantenimiento a buena parte de los equipos vendidos y el surgimiento de nuevas oportunidades para la prestación de servicios logísticos, constituyeron la génesis de la creación de las filiales BDC Tec y BDC Log, empresas 100 % de capital extranjero, enclavadas en la ZEDM.
De acuerdo con los directivos de la Oficina de la ZEDM, «la naturaleza de ambos negocios se corresponde con los objetivos e industrias pilares a desarrollar en la Zona, en aras de satisfacer las demandas nacionales y la sustitución de importaciones, además de brindar servicios eficientes que requiere la cadena de transporte y distribución del país, para lo cual Mariel cuenta con infraestructuras de clase mundial».
MÁS CERCA DE LA GESTIÓN INDUSTRIAL
«Desde que conocimos sobre la creación de la ZEDM nos mostramos interesados en establecernos allí y ampliar, de ese modo, la presencia y alcance de nuestras actividades en Cuba, pues ello nos ponía en mejor posición para ofrecerle una respuesta rápida a los clientes, para imprimirle dinamismo a la gestión industrial».
Así, de manera resumida, describió Jaime Croonenberghs el surgimiento de las empresas BDC Tec y BDC Log, luego de ser aprobados los proyectos por las autoridades cubanas, en mayo del 2015.
Ya en junio se habían constituido ambas entidades y desde enero del 2016 BDC Log comenzó sus operaciones con licencia temporal. Las acciones constructivas también empezaron a inicios de este año, tras la obtención de los permisos establecidos dentro del término de 180 días que prevé la Ley.
BDC Tec, en cambio, con toda la infraestructura terminada, debe iniciar su funcionamiento en los próximos días.
Ideada, básicamente, para satisfacer las demandas de la industria nacional, sin obviar exportaciones al área del Caribe, BDC Tec pretende, en palabras de Croonenberghs, el ensamblaje y reconstrucción de sistemas de tratamiento de agua con destino al sector industrial; el diseño y producción de sensores de temperatura especiales como los empleados en las termoeléctricas o en la actividad minera, así como la fabricación de pizarras eléctricas y sistemas de automatización y control.
La experiencia de trabajo en Cuba, después de tres décadas, señaló el empresario belga, nos ha permitido identificar problemas de calibración de equipos, como por ejemplo los sensores de temperatura y de presión, entre otros. Muchas veces, añadió, hay que mandarlos a calibrar al exterior, con el consabido costo que eso implica y la dilación de los trámites.
Con un taller de calibración homologado en el país, el funcionamiento de la industria se hace más dinámico, reflexionó, por lo cual ese será otro de los empeños de este usuario de la Zona Especial de Desarrollo Mariel.
En opinión de Jaime, todas las fabricaciones serán a solicitud. «Antes vendíamos equipos a las entidades cubanas y luego, en disímiles ocasiones, no tenían quien les hiciera el montaje o les brindara el servicio de postventa. Ahora se cierra el ciclo».
UNA LOGÍSTICA A LA MEDIDA
A diferencia de BDC Tec, BDC Log ha puesto en marcha una operación más compleja para satisfacer las demandas, a la medida, de disímiles clientes, en todo el territorio nacional, con diversos requerimientos de servicios logísticos y de transporte.
«Tenemos una flota de camiones, camionetas, montacargas y máquinas articuladas. Además, dispondremos de una instalación encargada del mantenimiento de tales equipos», puntualizó el empresario.
El servicio, acotó, será contratado por los clientes, y gracias al permiso de explotación temporal ya se labora en La Habana, Santiago de Cuba y Holguín.
Respecto a los montacargas y otros equipos, la modalidad empleada será el alquiler de los vehículos con su chofer, en aras de garantizar el personal capacitado para operarlos.
Desde la aprobación y creación de las empresas hasta hoy hemos avanzado de manera ágil, resaltó Andrés Romero García, gerente general de BDC Tec, quien puso énfasis en la eficacia del sistema de Ventanilla Única, además de los beneficios de estar establecidos en la ZEDM, especialmente aquellos relacionados con los regímenes y políticas especiales y la posibilidad de importar directamente, aspectos que sin dudas le imprimen inmediatez a la gestión empresarial.
