Cienfuegos, Cuba, 4 sep (Prensa Latina) - Video: Canal Caribe / TV Cubana.- El presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, recorrió hoy un hospital especializado y un nuevo proyecto cultural en esta ciudad del centro-sur de la isla, que el lunes celebrará el 65 aniversario de una gesta revolucionaria.
En el Centro Especializado Ambulatorio Héroes de Playa Girón, el mandatario conoció la inversión que se acomete para duplicar la capacidad de la sala de hemodiálisis.
Una remodelación permitirá instalar 15 riñones artificiales donados por la organización solidaria Cuba Francia Cooperación, que con otros tantos en existencia permitirá atender en cuatro turnos el tratamiento a los 120 pacientes del territorio afectados por insuficiencia renal.
La doctora Vivian Chávez, directora de la institución sanitaria, explico que tras dos años dedicados a la atención de pacientes graves por Covid-19, ahora se ocupa de niños sospechosos o confirmados de dengue.
Al propio tiempo retoma de manera paulatina su programa quirúrgico en nueve salones para cirugías menores y ginecológicas, que alivian la carga del Hospital Provincial Gustavo Aldereguía, del cual funciona como centro anexo.
“Esta es también una visión del futuro socialista de la Revolución. Es lindísimo que podamos tener así las cosas, en un momento tan duro como el que estamos viviendo en el país”, escribió Díaz-Canel en el libro de visitantes de la institución que celebra 13 años de fundada.
El mandatario visitó, además, el Barrio de los Artistas, un edificio que se remodela en el centro histórico de Cienfuegos (Patrimonio de la Humanidad) como sede de la Asociación Hermanos Saíz, que agrupa a artistas menores de 35 años.
El proyecto cultural que conjunta la obra del trovador Nelsón Valdés y el improvisador (de décimas) Marcos David Fernández fue el regalo de los jóvenes creadores al jefe de Estado.
A la salida de la instalación cultural, Díaz Canel dialogó con habitantes del centro histórico.
“Contentos de estar aquí en una ciudad que siempre enseña su potencialidad, su talento, su cultura, su educación y también su cariño”, les dijo el mandatario a los pobladores.
Díaz-Canel visita la ciudad de Cienfuegos, 240 kilómetros al sudeste de La Habana, con motivo de la celebración este lunes del acto por el 65 aniversario de la sublevación popular en esta ciudad contra la dictadura de Fulgencio Batista (1952-1958).
Presidente de Cuba resalta mantenimiento de industria de generación
Cienfuegos, Cuba, 4 sep (Prensa Latina) El presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, intercambió hoy aquí con trabajadores de la central termoeléctrica Carlos Manuel de Céspedes, donde destacó la importancia de cumplir con la estrategia de mantenimientos.
El mandatario resaltó la consagración de los trabajadores de la empresa y todo el sector energético nacional en el esfuerzo por elevar la capacidad generadora del país y minimizar las afectaciones a la población.
El esfuerzo de los trabajadores electroenergéticos en la actual coyuntura ha sido decisivo, con un nivel de innovación tremendo, expresó el también primer secretario del Comité Central del Partido Comunista.
Yeranis Zurita, director general de la planta, explicó que para llevar a la tercera unidad a su generación tope la solución técnica pasa por una parada de siete días, para lo cual cuentan con los recursos necesarios.
En el caso de la unidad número cuatro que debe recuperar 28 megawatts el proceso de mantenimiento parcial ampliado será más complejo y le llevará unos 90 días.
El presidente subrayó la importancia de los mantenimientos para mantener la estabilidad de la industria generadora y comentó que con la estrategia emprendida el país se estará alejando de los apagones en diciembre.
Adelantó que con las inversiones previstas para los primeros meses de 2023, el sistema podrá contar con una reserva que le permita desarrollar un plan de mantenimiento con eficiencia.
Díaz-Canel visita la ciudad de Cienfuegos, 240 kilómetros al sudeste de La Habana, con motivo de la celebración este lunes del acto por el 65 aniversario de la sublevación popular en esta ciudad contra la dictadura de Fulgencio Batista (1952-1958).
Presidente cubano visita termoeléctrica Carlos Manuel de Céspedes y otros sitios de interés en Cienfuegos
Cubadebate
El Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y Presidente de la República, Miguel Díaz -Canel Bermúdez, recorrió este domingo la CTE Carlos Manuel de Céspedes, en la provincia de Cienfuegos.
La visita tuvo lugar horas antes de conmemorar el aniversario 65 del levantamiento del 5 septiembre, en ese territorio, refiere la cuenta en Twitter de la Presidencia.
Esta termoeléctrica es de las más eficientes y estables del país, que en estos momentos aporta 270 MW al Sistema Eléctrico Nacional.
El mandatario cubano también visitó otros sitios de interés en la central provincia, como la sede de la Asociación Hermanos Saíz y el Centro Especializado Ambulatorio "Héroes de Playa Girón".
Este domingo se efectuará la Trovada en el teatro Tomás Terry y al amanecer del lunes un grupo de pioneros protagonizarán el asalto simbólico a la otrora base de la Marina de Guerra en Cayo Loco.
Además, el pueblo cienfueguero participará del acto central y peregrinación hasta el cementerio Tomás Acea.
(Con información de ACN)
Cuba: La heroica insurrección de Cienfuegos en su aniversario 65
La Habana (Prensa Latina) La insurrección armada de los marinos revolucionarios en Cienfuegos, junto a luchadores del Movimiento 26 de Julio y numerosos pobladores el 5 de septiembre de 1957, derrochó heroísmo y sangre desde el amanecer hasta la noche.
Por Marta Denis Valle
Historiadora, periodista y colaboradora de Prensa Latina
Con más de 50 mártires caídos en combate o asesinados por la tiranía de Fulgencio Batista (1952-1958), enterrados en fosas comunes, estos hechos siempre reciben el homenaje del pueblo cubano, como ahora, 65 años después.
Las acciones comenzaron alrededor de las 5:20 am con la toma de la base naval de Cayo Loco, del Distrito Sur. La jefatura se entregó sin resistencia; el armamento fue repartido entre los marinos y unos 70 luchadores clandestinos, y pronto se incorporaron tantos cienfuegueros que alrededor de 300 quedaron desarmados al agotarse el arsenal.
En pocas horas fue dominada la ciudad; los insurrectos ocuparon el Ayuntamiento, la Jefatura de la Policía y el Cuartel de Bomberos; controlaban las calles y se hicieron fuertes en otros puntos como el colegio San Lorenzo, la droguería Cosmopolita, el teatro Terry y el tostadero de café El Sol.
Al llegar los refuerzos del Ejército, el Cuartel de la Guardia Rural estaba pactando también su rendición a los sublevados.
Los defensores del Parque Martí lograron inicialmente rechazar a las tropas pero según pasaban las horas, contra la ciudad sublevada caía el peso de las fuerzas armadas del batistato. Contra ella lanzaron la aviación, el Tercio Táctico de Santa Clara y refuerzos desde Matanzas y de las fortalezas habaneras La Cabaña y Columbia.
El último foco rebelde, el colegio San Lorenzo, fue aplastado a las dos de la madrugada del 6 de septiembre. En horas de la noche, cuando los tanques atacaban el centro, los marinos pidieron a los civiles que se retiraran.
Los cadáveres del jefe del levantamiento, José Dionisio San Román Toledo (1930-1957) y de muchos de sus compañeros nunca aparecieron. Tras el aplastamiento de la insurrección, los cuerpos represivos de la dictadura batistiana comenzaron la cacería de los participantes.
Aplastada la insurrección, fue hecho prisionero y trasladado a La Habana; víctima de torturas, resultó asesinado por Julio Laurent, jefe del Servicio de Inteligencia Naval (SIN) de la tiranía batistiana, y su cuerpo arrojado al mar.
El joven teniente Dionisio San Román, natural de Bauta, La Habana, constituyó una figura clave en la insurrección; había sido jefe de Artillería del enclave naval y separado recientemente del cuerpo, el cual conocía perfectamente.
Las milicias del M-26-7 estuvieron al mando de Julio Camacho Aguilera (Santa Lucía, Oriente, 1924), jefe de Acción del Movimiento 26 de Julio en Las Villas y luchador clandestino desde 1955.
Al atardecer, Camacho y otros compañeros se trasladaron en un bote hasta el cayo Ocampo e intentaron partir hacia las montañas del Escambray, pero finalmente regresaron a la ciudad, donde se ocultaron.
Fue detenido en La Habana en noviembre de 1957 y salvajemente torturado (fractura de cinco costillas y la pérdida de la locomoción cierto tiempo), pero no pudieron probarle su participación.
El hoy veterano comandante del Ejército Rebelde se incorporó a la Sierra Maestra. Camacho participó en el alzamiento del 30 de noviembre de 1956 en Santiago de Cuba y lideró un foco guerrillero en Guantánamo, antes de la insurrección de Cienfuegos.
LA CONSPIRACIÓN
Desde 1956, soldados y cabos de la base naval de Cayo Loco habían hecho contacto con el M-26-7 y pensaban secundar el alzamiento del 30 de noviembre de ese año en Santiago de Cuba, pero no hubo condiciones debido a una movilización general de los cuerpos armados dictada por el régimen.
La acción se postergó en otras dos ocasiones -en abril y el 28 de mayo de 1957-, la última vez porque 35 de los complotados del Movimiento cayeron presos en Cienfuegos por una delación. A pesar de las torturas, ninguno habló y el plan de la marina se mantuvo en secreto.
La conspiración se extendió a un grupo de marinos, aviadores, soldados, clases y oficiales del ejército en La Habana, donde una nave de guerra debía disparar contra el Palacio Presidencial y después navegar hacia el oeste, junto a la costa, hasta situarse al nivel del Campamento Militar de Columbia.
Algunos oficiales incorporados recientemente decidieron la víspera, por su cuenta, postergar la acción 24 o 48 horas y avisaron a la fragata.
Mientras, desconociendo lo anterior, partieron desde la capital, según los planes originales, Julio Camacho Aguilera, dirigente del M-26-7, y el teniente Dionisio San Román, quienes realizarían el levantamiento de Cayo Loco.
Con las 300 armas de este enclave de la Marina, existía la posibilidad de abrir un nuevo frente guerrillero en las montañas del Escambray.