Bandera cubana. Foto: Abel Padrón Padilla/ Cubadebate. Video: TV Cubana.
Cubadebate
Hemos recibido en los últimos días muchos mensajes de amigas y amigos de la Casa y de la Revolución Cubana que, ante las persistentes y sombrías noticias que proliferan en medios y redes, preguntan con inquietud qué está pasando en nuestro país. ¿Se están enfrentando realmente “el pueblo” y “el gobierno”? ¿Es Cuba un “Estado fallido” incapaz de solucionar una crisis?
El mismo Estado que llaman “fallido” convocó valientemente, hace apenas una semana, al referendo sobre el muy avanzado Código de las Familias. La mayoría inequívoca del pueblo cubano lo apoyó, y unas horas después se convirtió en Ley. Antes, este proyecto inclusivo, gestado desde la participación popular, tuvo que atravesar una feroz campaña de satanización desde supuestos preceptos morales y religiosos. Tampoco faltaron manipulaciones abiertamente políticas. Nada de esto impidió el triunfo del sí, reflejado de modo pálido y reduccionista en la prensa hegemónica.
Coincidiendo con la entrada en vigor del Código, un huracán arrasador azotó la región occidental de Cuba, y su estela dejó decenas de muertos en los Estados Unidos. Es doloroso y difícil, para cualquier país que sufra tal contingencia, volverse a levantar, atenuar el sufrimiento de los damnificados, intentar recuperarse de los daños y avanzar.
Para Cuba –estrangulada económicamente y calumniada durante décadas– el desafío se multiplica. Solo la incontestable decisión de destinar los escasos recursos del país a que nadie quede desamparado y la convicción de que únicamente con la participación y el respaldo del pueblo es posible salir adelante, pueden explicar que de nuevo logremos sobreponernos, sin dejar de pensar en ir mucho más allá.
Mientras personas y organizaciones de todo el mundo han expresado su solidaridad y ofrecido apoyo concreto a Cuba, mientras gobiernos hermanos han brindado asistencia y amigos como los de The People’s Forum han reclamado desde las páginas del New York Times al presidente Biden que dé muestras del más elemental espíritu humanitario y no obstaculice el propósito de la Isla de levantarse con sus propios esfuerzos, otras voces han aprovechado la tragedia para instalar la matriz de opinión de que nuestros males y las dificultades para enfrentarlos son consecuencia de la incapacidad del gobierno de Cuba.
Quieren capitalizar el lógico malestar de ciudadanos privados de servicios básicos con la esperanza de que la naturaleza logre, por fin, lo que no han podido tantos intentos desesperados de destruir la Revolución. Ahora politizan manifestaciones y reclamos espontáneos, mueven a través de las redes histéricos y agresivos discursos de odio, incitan a la violencia callejera, se oponen a la más mínima flexibilización del bloqueo y siguen al pie de la letra el guion del “golpe blando”.
Se cumplen dentro de pocos días sesenta años de la Crisis de Octubre, tal vez el momento de mayor riesgo vivido por el proceso revolucionario, aquellas jornadas en que –a decir del Che en su carta de despedida– Fidel brilló como pocos estadistas en la historia. Otra vez el destino nos ofrece la alternativa de rendirnos ante adversidades y amenazas o imponernos a ellas con imaginación y audacia. Ningún “Estado fallido” podría soñar con la segunda opción; ningún pueblo digno lo apoyaría.
Hoy la Cuba tantas veces difamada se va recuperando de los estragos causados por el huracán. En lugar de la represión que se atribuye al fabricado “país virtual”, en el “real” las autoridades recorren permanentemente las zonas afectadas y dialogan de manera directa con los ciudadanos.
Como en todas las coyunturas difíciles, la solidaridad, principio básico de nuestra convivencia, pasa a primer plano. Sepan nuestros amigos y amigas que la abrumadora mayoría del pueblo se reconoce en sus dirigentes, participa en la recuperación del país y defiende el principio que está en el umbral de la nueva Constitución aprobada en abril de 2019: “Cuba es un Estado socialista de derecho y justicia social, democrático, independiente y soberano”.
La Habana, 2 de octubre de 2022.
Denuncian manipulación sobre situación en Cuba tras huracán
La Habana, 2 oct (Prensa Latina) La Casa de las Américas de Cuba denunció hoy que los enemigos de la Revolución quieren capitalizar el lógico malestar de los ciudadanos de la isla privados de servicios básicos por el huracán Ian.
En una declaración titulada Ante la Cuba virtual, la Cuba real, la institución subraya que los interesados en acabar con el proceso socialista en la isla tienen la esperanza de que la naturaleza logre, por fin, lo que no han podido tantos intentos desesperados de destruir la Revolución.“Ahora politizan manifestaciones y reclamos espontáneos, mueven a través de las redes histéricos y agresivos discursos de odio, incitan a la violencia callejera, se oponen a la más mínima flexibilización del bloqueo y siguen al pie de la letra el guion del golpe blando, advierte el documento.
Recuerda que en pocos días se cumplen sesenta años de la Crisis de Octubre, tal vez el momento de mayor riesgo vivido por el proceso revolucionario.
Según el texto, otra vez el destino ofrece a los cubanos la alternativa de rendirse ante adversidades y amenazas o imponerse a ellas con imaginación y audacia.
Ningún “Estado fallido”, como señalan algunos enemigos, podría soñar con la segunda opción; ningún pueblo digno lo apoyaría, apunta la declaración.
Aclara que Cuba se recupera de los estragos causados por el huracán Ian en días recientes y en lugar de la represión que se atribuye al fabricado “país virtual”, en el “real” las autoridades recorren permanentemente las zonas afectadas y dialogan de manera directa con los ciudadanos.
Sostiene que como en todas las coyunturas difíciles, la solidaridad, principio básico de la convivencia en la nación antillana, pasa a primer plano.
En respuesta a los amigos preocupados por la situación en la isla caribeña, el documento refiere que la abrumadora mayoría del pueblo se reconoce en sus dirigentes y participa en la recuperación del país.
Además, ratifica que esa mayoría defiende el principio que está en el umbral de la nueva Constitución aprobada en abril de 2019: “Cuba es un Estado socialista de derecho y justicia social, democrático, independiente y soberano”.
Cuba defiende la vitalidad de su Revolución ante dudas y ataques
La Habana, 2 oct (Prensa Latina) La Casa de las Américas de Cuba refrendó hoy la vitalidad del proceso socialista en la isla en una declaración a los amigos de su Revolución y de la institución.
El texto advierte sobre los mensajes recibidos con preguntas sobre los últimos acontecimientos en el país ante las persistentes y sombrías noticias publicadas en medios de comunicación y redes sociales.¿Se están enfrentando realmente “el pueblo” y “el gobierno”? ¿Es Cuba un “Estado fallido” incapaz de solucionar una crisis?, son algunas de las interrogantes a las que responde el documento.
Al respecto, Casa de las Américas señala que el supuesto Estado que llaman “fallido” convocó valientemente, hace apenas una semana, al referendo sobre el muy avanzado Código de las Familias, el cual fue apoyado por la mayoría inequívoca del pueblo cubano y unas horas después se convirtió en Ley.
Recuerda que antes ese proyecto inclusivo, gestado desde la participación popular, tuvo que atravesar una feroz campaña de satanización desde supuestos preceptos morales y religiosos.
Expresa que tampoco faltaron manipulaciones abiertamente políticas. Sin embargo, significa que nada de eso impidió el triunfo del sí, reflejado de modo pálido y reduccionista en la prensa hegemónica.
La declaración sostiene que hace menos de una semana un huracán arrasador azotó la región occidental de Cuba, y su estela dejó decenas de muertos en Estados Unidos.
“Es doloroso y difícil, para cualquier país que sufra tal contingencia, volverse a levantar, atenuar el sufrimiento de los damnificados, intentar recuperarse de los daños y avanzar”, apunta.
Señala que para Cuba, estrangulada económicamente y calumniada durante décadas, el desafío se multiplica.
Destaca cómo ante tales retos se mantiene la decisión de destinar los escasos recursos del país a que nadie quede desamparado y la convicción de que únicamente con la participación y el respaldo del pueblo es posible salir adelante.
“Pueden explicar que de nuevo logremos sobreponernos, sin dejar de pensar en ir mucho más allá”, confirma el mensaje de Casa a los amigos de la Revolución cubana.
En tal sentido, llama la atención sobre las muchas personas y organizaciones de todo el mundo que han expresado su solidaridad y ofrecido apoyo concreto a Cuba, al igual que gobiernos hermanos que han brindado asistencia a la nación antillana.
En ese caso, resalta la decisión de la organización estadounidense The People’s Forum que reclamó desde las páginas del diario New York Times al presidente Joe Biden que dé muestras del más elemental espíritu humanitario y no obstaculice el propósito de la isla de levantarse con sus propios esfuerzos.
Reconoce, no obstante, que mientras eso sucede, otras voces han aprovechado la tragedia para instalar la matriz de opinión de que los males y las dificultades para enfrentar las actuales problemas que atraviesa la isla son consecuencia de la incapacidad del su Gobierno.